Este documento es una carta del apóstol Juan que enfatiza la importancia del amor fraterno entre los creyentes. Juan dice que Dios es amor y que aquellos que aman a Dios deben también amar a sus hermanos. Quien dice amar a Dios pero odia a su hermano es un mentiroso. El amor por los demás es la señal de que hemos pasado de la muerte a la vida.