Este documento describe los siete derramamientos de la sangre de Cristo, incluyendo el quinto derramamiento de su sangre de las manos clavadas, que habla de la unción y activa los dones en los creyentes para sanar, liberar y hacer buenas obras. Jesús quería redimir las manos de los creyentes para que recuperen la creatividad y productividad perdidas y usen sus habilidades para bendecir a otros. El poder del Espíritu Santo se da para amar, producir riquezas y hacer milagros.