Diego quiere que los Reyes Magos reconozcan sus zapatos para recibir juguetes. Intenta limpiarlos con betún pero ensucia su pijama. Más tarde, se da cuenta de que no dejó comida para los Reyes ni agua para los camellos, y al tratar de arreglarlo ensucia más su ropa. Sus padres le dan un chándal para dormir. Por la noche, Gaspar aparece con la nariz sangrando después de tropezar con el monopatín de Diego. Diego intenta curarlo pero termina ensuciándolo más