1. Una investigación
dirigida por César Menor
Salván en colaboración
con el Museo de Ciencias
Naturales halla las claves
del cambio climático que
modificó el paisaje y el
tipo de vegetación
:: FRANCISCO GÓNGORA
VITORIA. El ámbar encontrado en
Peñacerrada en 1994 por el gemó-
logo Rafael López del Valle sigue
abriendo nuevas ventanas de cono-
cimiento sobre lo ocurrido en laTie-
rra hace 90 millones de años, cuan-
do los dinosaurios vivían en este
territorio llamado Álava.
Un equipo de investigadores di-
rigido por César Menor, entre los
que se encuentra el director del Mu-
seo de Ciencias Naturales, Jesús
Alonso, dependiente de la Diputa-
ción alavesa ha descubierto una
nueva molécula en el ámbar llama-
da ‘ambereno’, un hidrocarburo aro-
mático muy abundante en los ám-
bares cretácicos de la cuenca Vas-
co-Cantábrica, como el de Peñace-
rrada, único en el mundo tanto por
su antigüedad como por sus fósiles.
La novedad del hallazgo es que
hasta ahora se había investigado los
restos paleontológicos, insectos,
invertebrados, vestigios de dino-
saurios fosilizados en el inte-
rior de la resina. El nuevo
trabajo, sin embargo, ha
conseguido catalogar el
‘ambereno’ y con ello
definir una familia de
moléculas llamadas bio-
marcadores que aportan
mucha información sobre
la vida del pasado.
«Hace 90 millones de
años había un estrecho ma-
rino desde Asturias a Caste-
llón pasando por Álava. En sus ori-
llas había grandes bosques tropica-
les donde vivían algunas especies
de dinosaurios. Las moléculas que
hemos descubierto nos dicen que
había dos tipos de árboles, en
el País Vasco y Teruel do-
minaban los anteceso-
res de las actuales arau-
carias y en la zona de
Cantabria-Asturias el
ámbar se formó a par-
tir de resina derivada de
una especie de antiguo
ciprés llamado Cheirole-
pidiaceae», señala el bio-
químico César Menor.
Este investigador ma-
drileño de 43 años trabaja actual-
mente en el Georgia Institute ofTe-
chnology, en Estados Unidos. Cuan-
do empezó su estudio investigaba
en el Centro de Astrobiología del
CSIC-INTA. Por razones de recor-
tes se tuvo que marchar al extran-
jero.
Como si fuera un forense, César
Menor ha podido consignar que
hace 93 millones de años –el perío-
do que se conoce como Cenoma-
niense-Turoniense– se produjo la
desaparición de estos bosques a cau-
sa de uno de un episodio de cam-
bios climático con alto efecto in-
vernadero, uno de los numerosos
que ha registrado la historia de la
Tierra y en el que también desapa-
recieron animales como los Pilo-
saurios e Ictiosaurios. «A partir de
esa fecha ya no hubo más resina con
esa composición, pero aparecieron
nuevos árboles. La mayoría de los
componentes de las resinas están
aún por descubrir», argumenta el
científico.
Aplicación arqueológica
Además, el ‘ambereno’ y sus molé-
culas tienen una aplicación direc-
ta, ya que ayudan a trazar el depó-
sito de origen en objetos de ámbar
encontrados en yacimientos arqueo-
lógicos. En muchas excavaciones
aparecen abalorios de ámbar. En una
de esas tumbas excavadas en Gali-
cia ha aparecido ámbar procedente
de Álava. Los historiadores relacio-
nan estos hallazgos con migracio-
nes e intercambios comerciales .
El descubrimiento ha sido publi-
cado en una de las revistas cientí-
ficas más prestigiosas, Organic Geo-
chemistry, y serán dados a conocer
en una próxima conferencia.
Ámbar de Peñacerrada incrustada en la roca, que actúa como una cápsula del tiempo para los científicos. :: MUSEO DE CIENCIAS NATURALES
Hallan una nueva molécula en el ámbar
y el bosque de hace 93 millones de años
 El ámbar de Peñacerrada fue
descubierto en 1994 por el gemó-
logo Rafael López del Valle. Desde
entonces el aluvión de descubri-
mientos científicos en botánica,
en invertebrados, en vida micros-
cópica es asombroso.
 ‘Ambereno’. Es la molécula des-
cubierta por el equipo de César
Menor. Supone un paso de gigante
para conocer los tipos de árboles
que originaron la resina del ám-
bar. Tiene aplicación arqueológica.
EL HALLAZGO
César Menor
Salvánr
_9Sábado 23.01.16
EL CORREO CIUDADANOS