Los requisitos mínimos para instalar versiones de Windows como Windows XP, Windows 7 y Windows 8 incluyen un procesador de al menos 1 GHz, entre 64 MB y 2 GB de RAM, de 16 a 20 GB de espacio en disco duro dependiendo de si es de 32 o 64 bits, una tarjeta gráfica compatible con DirectX 9 y controlador WDDM, y dispositivos de entrada como teclado, mouse y monitor.