El documento describe cómo la inteligencia universal fluye a través de todo lo creado en forma de energía. Esta energía invisible da vida a todo en el universo y también existe dentro de los seres humanos como el alma o la conciencia. Los pensamientos, emociones y acciones de una persona son manifestaciones de su estado energético interno, ya sea equilibrado o desequilibrado. Cuando las energías internas de una persona se desarrollan y perfeccionan de manera equilibrada, se fortalecen valores positivos como el amor, la paz y la felicidad