El amor requiere esfuerzo para mantenerse vivo, al igual que un ser humano necesita aire, alimento y agua. Para darle "aire" al amor, se debe dar espacio al otro y aceptarlo. Para darle "alimento", se deben dar detalles como notas, flores o llamadas para expresar afecto. Para darle "agua", se debe dejar que los sentimientos fluyan hacia la otra persona a través de la alegría, el entusiasmo y las vibraciones positivas.