El documento describe varias especies animales que se encuentran en peligro de extinción debido a la actividad humana, incluyendo el lince ibérico cuya población se ha reducido más de un 50% en los últimos 10 años, el cóndor andino amenazado por la cacería y pérdida de hábitat, y el loro orejamarillo que se encuentra en peligro crítico con solo pequeños grupos remanentes en pocas zonas.