La torre biónica de Shangai se basa en la imitación de formas naturales para lograr ligereza, resistencia, flexibilidad y capacidad de adaptación. Su cimentación flotante crece horizontalmente como las raíces de un árbol. Su estructura hueca de hormigón imita las transformaciones estructurales de ciertas especies y permite la circulación vertical. Al igual que los árboles, la torre está diseñada para resistir sismos y fuegos mediante un sistema de contenedores encapsulados y áreas libres que actúan como