El documento identifica varias razones por las cuales las oraciones pueden no ser escuchadas por Dios: 1) pecados no confesados, 2) falta de fe, 3) desobediencia, 4) falta de perdón hacia otros, 5) motivos falsos al orar, 6) idolatría, 7) indiferencia hacia otros, y 8) indiferencia hacia la soberanía de Dios. El documento enfatiza la importancia de confesar los pecados, orar con fe, obedecer a Dios, y perdonar a otros para que Dios escuche y responda favorablemente