Los precios del petróleo aumentaron debido a la caída de las existencias de destilados en Estados Unidos, lo que generó expectativas de mayor demanda de combustible para calefacción durante el invierno. Expertos también señalaron que datos económicos más débiles en algunas regiones podrían afectar negativamente la demanda. El precio del barril de Brent ganó 31 centavos a 107,38 dólares, mientras que el barril estadounidense subió a 96,22 dólares.