El documento critica a los funcionarios públicos por ignorar las Escrituras y no cumplir los mandamientos de Dios. Señala que Jesús criticó a los escribas y fariseos por ser hipócritas y devorar las casas de las viudas. También acusa al procurador de seguir ídolos en lugar de honrar a Dios y de ser injusto al tomar sobornos para pervertir la justicia.