Pierre Bonnard comenzó a practicar la fotografía en 1890 utilizando una cámara Kodak portátil. Circunscribió su práctica fotográfica a retratar a su círculo familiar y amigos en sus propiedades. Sus fotografías comparten las mismas cualidades que sus pinturas, incluyendo audacia, armonía decorativa, gestos vivos y una gracia misteriosa que transfigura escenas cotidianas. Aunque Bonnard no se tomó su práctica fotográfica en serio, sus f
2. En 1888, Kodak lanzó su primera cámara portátil con el lema "Usted aprieta el botón,
nosotros hacemos el resto." Con esta invención, la fotografía se hizo accesible a casi
todo el mundo, fomentando la creatividad y el talento en todas sus formas.
Pintura y fotografía son prácticas afines en los artistas. Edvard Munch, Edgar Degas o
Edouard Vuillard son ejemplos señalables. Como pintor perteneciente al grupo de los
Nabis, Pierre Bonnard empezó a practicar la fotografía hacia 1890. Como aficiondado
aprovechó la salida al mercado de la pocket Kodak, pequeña cámara muy popular
caracterizada por la rapidez con la que podía sacar fotografías
Pierre Bonnard circunscribe su práctica fotográfica a su círculo familiar y de amigos en
sus diferentes propiedades como Noisy-le-Grand o en Grand-Lemps, Dauphiné. En
Bonnard existe un paralelismo entre la prácticas de la pintura y la fotografía. Marta,
compañera y modelo figura tanto en sus fotografías como en sus cuadros. Sus
fotografías tienen la misma audacia, la inclinación por la armonía decorativa, por el
gesto vivo y la misma gracia misteriosa que transfigura las escenas cotidianas
(cualidades puestas de manifiesto por la técnica de la instantánea).
La agudeza de la visión de Bonnard y la calidad de su invención hacen que sus
fotografías sean obras maestras, aun cuando el artista nunca se tomó en serio.