El Jefe Seattle responde a la oferta del Presidente Franklin Pierce de comprar las tierras de los indios Swamish. En su respuesta, el Jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte integral de su cultura e identidad. Explica que la tierra, el agua, el aire y los animales son como familia para ellos. Advierte que si venden la tierra, los estadounidenses blancos deben recordar su sagrado significado y enseñar a sus hijos a respetar y cuidar la tierra y todo lo que ella contiene.
La carta del Gran Jefe Seattle expresa su preocupación por la venta de las tierras de los indígenas Swamish a los Estados Unidos. Explica que la tierra, el agua y el aire son sagrados para su pueblo y parte integral de su cultura e identidad. También advierte sobre las consecuencias destructivas de la forma de vida del hombre blanco y su trato de la naturaleza como una mercancía. A pesar de estas preocupaciones, el Gran Jefe Seattle considerará la oferta de compra con la condición de que los estadounidenses respeten la
El Gran Jefe Seattle expresa en su carta al Presidente Franklin Pierce su profundo respeto por la tierra y sus recursos naturales. Aunque considera la oferta de compra de las tierras, explica que la tierra, el agua y el aire son sagrados para su pueblo. Advierte que si se vende la tierra, los estadounidenses deben recordar su sagrado significado y enseñar eso a sus hijos, o de lo contrario destruirán la tierra así como su propia cultura.
Lo que ocurre a la tierra ocurrirá a los hijos de la TierraCursos Dra. Guerra
El documento fue escrito hace 132 años. Su autor es el Jefe Seattle de la tribu Suwamish de los territorios del noroeste de los Estados Unidos que ahora forman el estado de Washington. Se trata de una carta que Seattle envió en 1855 al presidente Franklin Pierce en respuesta a la oferta de compra de las tierras de los Suwamish.
La carta expresa la perspectiva del jefe indio Seattle sobre la propuesta del presidente estadounidense de comprar las tierras de su tribu. Seattle describe la tierra como sagrada para su pueblo y parte integral de su identidad. También expresa preocupación por el impacto que tendrá la llegada de los colonos blancos en el medio ambiente y los modos de vida indígenas.
C2 L1 Discurso Jefe Indio
Actividad: Este texto trae un cuestionario inicial. NO LO CONSIDERE. (Era de otra actividad)
Luego de realizar la lectura, seleccione una frase del texto que a usted le cause impresión (No más de 15 palabras en la frase). Y justifique en no más de 85 palabras el motivo de dicha impresión.
El jefe indio Seattle expresa en su carta al presidente de Estados Unidos en 1855 su oposición a la venta de las tierras indias. Explica que la tierra, el aire y los animales son sagrados para los indios nativos y parte de su cultura e identidad. Advierte que si los estadounidenses compran las tierras deben recordar que son sagradas y enseñar a sus hijos a respetar la naturaleza y a todos los seres vivos.
Texto de la carta que envió en 1854 el jefe indio Seattle de la tribu Suwamish al presidente de los Estados Unidos Franklin Pierce en respuesta a la oferta de compra de las tierras de los Suwamish en el noroeste de los Estados Unidos. Es considerada "la declaración más hermosa y profunda que jamás se haya hecho sobre el medio ambiente".
La carta del Gran Jefe Seattle expresa su preocupación por la venta de las tierras de los indígenas Swamish a los Estados Unidos. Explica que la tierra, el agua y el aire son sagrados para su pueblo y parte integral de su cultura e identidad. También advierte sobre las consecuencias destructivas de la forma de vida del hombre blanco y su trato de la naturaleza como una mercancía. A pesar de estas preocupaciones, el Gran Jefe Seattle considerará la oferta de compra con la condición de que los estadounidenses respeten la
El Gran Jefe Seattle expresa en su carta al Presidente Franklin Pierce su profundo respeto por la tierra y sus recursos naturales. Aunque considera la oferta de compra de las tierras, explica que la tierra, el agua y el aire son sagrados para su pueblo. Advierte que si se vende la tierra, los estadounidenses deben recordar su sagrado significado y enseñar eso a sus hijos, o de lo contrario destruirán la tierra así como su propia cultura.
Lo que ocurre a la tierra ocurrirá a los hijos de la TierraCursos Dra. Guerra
El documento fue escrito hace 132 años. Su autor es el Jefe Seattle de la tribu Suwamish de los territorios del noroeste de los Estados Unidos que ahora forman el estado de Washington. Se trata de una carta que Seattle envió en 1855 al presidente Franklin Pierce en respuesta a la oferta de compra de las tierras de los Suwamish.
La carta expresa la perspectiva del jefe indio Seattle sobre la propuesta del presidente estadounidense de comprar las tierras de su tribu. Seattle describe la tierra como sagrada para su pueblo y parte integral de su identidad. También expresa preocupación por el impacto que tendrá la llegada de los colonos blancos en el medio ambiente y los modos de vida indígenas.
C2 L1 Discurso Jefe Indio
Actividad: Este texto trae un cuestionario inicial. NO LO CONSIDERE. (Era de otra actividad)
Luego de realizar la lectura, seleccione una frase del texto que a usted le cause impresión (No más de 15 palabras en la frase). Y justifique en no más de 85 palabras el motivo de dicha impresión.
El jefe indio Seattle expresa en su carta al presidente de Estados Unidos en 1855 su oposición a la venta de las tierras indias. Explica que la tierra, el aire y los animales son sagrados para los indios nativos y parte de su cultura e identidad. Advierte que si los estadounidenses compran las tierras deben recordar que son sagradas y enseñar a sus hijos a respetar la naturaleza y a todos los seres vivos.
Texto de la carta que envió en 1854 el jefe indio Seattle de la tribu Suwamish al presidente de los Estados Unidos Franklin Pierce en respuesta a la oferta de compra de las tierras de los Suwamish en el noroeste de los Estados Unidos. Es considerada "la declaración más hermosa y profunda que jamás se haya hecho sobre el medio ambiente".
Gran Jefe Seattle, la sabiduría prehistórica presente.banquetearte
La carta expresa la cosmovisión de los pieles rojas, quienes veían la tierra como sagrada y todo en ella como interconectado. Para ellos, la tierra, sus ríos, montes, plantas y animales no eran objetos a poseer sino parte de su familia. Advierten al presidente estadounidense que la forma en que los colonos trataban la tierra conduciría a su destrucción. Piden que se recuerde que comparten un mismo dios y destino con la tierra.
La carta del Jefe Seattle expresa su perspectiva sobre la tierra y la naturaleza como sagradas, y su rechazo a vender los territorios a los Estados Unidos. Explica que la tierra no puede comprarse porque es la madre de su pueblo, y que cada parte de la naturaleza tiene un significado espiritual. Advierte también que el estilo de vida de los colonos blancos eventualmente contaminará la tierra y los recursos, perjudicando a todos.
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Pierce de comprar las tierras de su tribu en el noroeste de Estados Unidos. Agradece la oferta pero expresa su tristeza por la desaparición inevitable de su pueblo y cultura frente al avance de los colonos blancos. Acepta la venta de las tierras pero pide que se respete el derecho de su gente a visitar las tumbas de sus antepasados en esas tierras, ahora sagradas para ellos.
El jefe Seattle responde a la oferta del gobierno estadounidense de comprar las tierras de su pueblo. Explica que la tierra, la naturaleza y todos sus elementos son sagrados para los indígenas, y forman parte integral de su cultura e identidad. Si bien considera la oferta, advierte que la forma de vida y concepción del mundo de los blancos es muy diferente y podría dañar el equilibrio natural.
Carta del jefe seattle al presidente de los Estados Unidosdianegasso
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Pierce de comprar las tierras de los nativos americanos en el noroeste de Estados Unidos. El Jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte de su identidad, y que venderla sería muy difícil. También advierte al presidente que si compran la tierra, los estadounidenses deben recordar que la tierra, los ríos y los animales son sagrados y están interconectados, y que el daño a la tierra traerá consecuencias.
Carta del jefe seattle al indio piel roja al presienteHeribay Escobedo
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Franklin Pierce de comprar las tierras de los nativos americanos en el noroeste de Estados Unidos. El Jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte integral de su identidad. Aunque considerará la oferta, enfatiza que la tierra debe ser tratada con respeto y que los nuevos colonos deben vivir en armonía con la naturaleza y los animales, como lo hacen los nativos americanos.
Carta del jefe seattle al presidente de los estados unidosforestales
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Pierce de comprar las tierras de su tribu en el noroeste de Estados Unidos. Expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte de su identidad, y que venderla sería como vender el cielo o el aire. Sin embargo, considerará la oferta con la condición de que los estadounidenses respeten la tierra y traten a los animales como hermanos, comprendiendo que todos están interconectados. Advirtió que si no cuidan la tierra, el destino de los blancos será
Noah Sealth, jefe indio de la tribu Duwamish, escribió una carta en 1854 en respuesta a la propuesta del presidente Franklin Pierce de crear una reserva india y comprar las tierras indias. En su carta, Noah Sealth expresa que la tierra, el agua, el aire y todos los elementos de la naturaleza son sagrados para los pueblos indígenas. Advierte al presidente que la forma de vida del hombre blanco, basada en la explotación de la tierra y los recursos naturales, conducirá a la destrucción del
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Franklin Pierce de comprar las tierras de su tribu en el noroeste de Estados Unidos. Expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte de su identidad. Acepta considerar la oferta pero con la condición de que los estadounidenses respeten la tierra y traten a los animales como hermanos, comprendiendo que todo está interconectado. Advirtió que si no cuidan la tierra, esta se volverá en su contra como ha ocurrido con otras tribus.
El jefe Piel Roja de Seattle responde a la oferta del presidente de Estados Unidos para comprar los territorios del noroeste a cambio de una reservación. Rechaza la idea de vender o comprar la tierra, que es sagrada para su pueblo. Advierte que si aceptan la oferta, el hombre blanco debe recordar que los ríos, animales, aire y tierra son sagrados, y enseñar esto a sus hijos, pues todos están interconectados. Teme que el apetito del hombre blanco destruya la tierra y deje un des
El jefe Seattle expresa en su carta al presidente de Estados Unidos que la tierra, los animales y todos los elementos de la naturaleza son sagrados para los indígenas americanos. Advierte que si los estadounidenses compran sus tierras deben recordar que son sagradas y enseñar eso a sus hijos, y deben tratar a los animales como hermanos. También expresa su temor de que el apetito de los estadounidenses destruya la tierra y deje solo un desierto.
El Jefe Seattle expresa su preocupación por la venta de las tierras de su pueblo a los Estados Unidos, ya que la tierra es sagrada para ellos. Explica que la tierra, el agua, el aire y todos los elementos de la naturaleza son parte de su cultura e identidad. Sin embargo, acepta considerar la oferta con la condición de que los estadounidenses protejan la tierra y enseñen a sus hijos a respetarla.
Este documento presenta la carta escrita por el jefe Seattle en respuesta a una oferta del presidente de Estados Unidos para comprar los territorios del noroeste del país que hoy forman el estado de Washington. En la carta, el jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y es difícil de vender. También advierte sobre los impactos negativos que podría tener la llegada de los colonos estadounidenses y la destrucción del medio ambiente natural. Finalmente, pide que se recuerde la conexión espiritual entre la tierra
El Gran Jefe Seattle dio un discurso en 1855 al ceder las tierras de los Dewamish a los colonos blancos. En su discurso, el Jefe Seattle expresa que la tierra, el agua y los animales son sagrados para su pueblo. Advierte que aunque los blancos no comprenden esta conexión espiritual con la tierra, el daño que le causen a la tierra los dañará a ellos también. El Jefe Seattle teme que el estilo de vida de los colonos destruya el equilibrio natural y lleve a su pueblo a la
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Franklin Pierce de comprar las tierras de los pueblos indígenas en el noroeste de Estados Unidos. El Jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte integral de su identidad. Acepta considerar la oferta con la condición de que los estadounidenses blancos respeten la tierra y traten a los animales como hermanos, comprendiendo que todos están interconectados. Advirtió que si no cuidan la tierra, sufrirán el mismo destino que los pueb
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce para crear una reserva india y acabar con los enfrentamientos entre indios y blancos. En su respuesta, Sealth creó el primer manifiesto en defensa del medio ambiente, argumentando que la tierra no puede comprarse o venderse ya que es sagrada para su pueblo y parte de su identidad. Sealth advirtió que el estilo de vida de los blancos destruiría la tierra y que debían aprender a vivir en armonía con ella.
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce para crear una reserva india con un manifiesto en defensa del medio ambiente. En su respuesta, Sealth expresó que la tierra, el agua y todos los elementos naturales son sagrados para su pueblo y no pueden ser comprados o vendidos. Advirtió también que la explotación sin límites de la naturaleza por parte de los colonos blancos eventualmente destruirá el medio ambiente y a la humanidad.
Noah Sealth, jefe indio de la tribu Duwamish, respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce de 1854 para crear una reserva india y comprar sus tierras con un manifiesto en defensa de la tierra y el medio ambiente. Sealth expresó que la tierra no puede comprarse porque es sagrada para su pueblo y parte de su identidad, y advirtió que el estilo de vida destructivo del hombre blanco conducirá a la destrucción de la tierra y de sí mismos si no cambian su forma de relacionarse con ella.
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce para crear una reserva india y acabar con los enfrentamientos entre indios y blancos con un manifiesto en defensa del medio ambiente y la naturaleza. En su respuesta, Sealth rechazó la idea de vender o comprar las tierras indias, que consideraba sagradas, y advirtió sobre las consecuencias de la destrucción del medio ambiente por parte de los colonos blancos.
El Gran Jefe Seattle expresa en su carta al Presidente Franklin Pierce su profundo respeto por la tierra y los recursos naturales que el pueblo Swamish considera sagrados. Aunque considera la oferta de compra de las tierras, enfatiza que la tierra, el agua, el aire y todos los seres vivos son parte de la identidad de su pueblo. Insta a los estadounidenses a recordar esta conexión sagrada con la tierra y a tratar los recursos naturales y a los animales con la misma compasión.
Carta del Jefe Seattle al presidente de los Estados Unidos.pdfCARMENALVARADO55
El jefe Seattle responde a la oferta del presidente Franklin Pierce de 1854 para comprar los territorios del noroeste de Estados Unidos. El jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte de su identidad, y que no puede ser comprada. Sin embargo, considerará la oferta con la condición de que los estadounidenses respeten la tierra y a los animales como sus hermanos.
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Franklin Pierce de comprar las tierras de los nativos americanos en el noroeste de Estados Unidos. El Jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte integral de su identidad. Aunque considerará la oferta, enfatiza que la tierra no puede ser comprada ni vendida. Insta a los estadounidenses a recordar la conexión sagrada entre la tierra y los pueblos indígenas, y a tratar la tierra y a los animales con el mismo respeto que a sus hermanos
Gran Jefe Seattle, la sabiduría prehistórica presente.banquetearte
La carta expresa la cosmovisión de los pieles rojas, quienes veían la tierra como sagrada y todo en ella como interconectado. Para ellos, la tierra, sus ríos, montes, plantas y animales no eran objetos a poseer sino parte de su familia. Advierten al presidente estadounidense que la forma en que los colonos trataban la tierra conduciría a su destrucción. Piden que se recuerde que comparten un mismo dios y destino con la tierra.
La carta del Jefe Seattle expresa su perspectiva sobre la tierra y la naturaleza como sagradas, y su rechazo a vender los territorios a los Estados Unidos. Explica que la tierra no puede comprarse porque es la madre de su pueblo, y que cada parte de la naturaleza tiene un significado espiritual. Advierte también que el estilo de vida de los colonos blancos eventualmente contaminará la tierra y los recursos, perjudicando a todos.
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Pierce de comprar las tierras de su tribu en el noroeste de Estados Unidos. Agradece la oferta pero expresa su tristeza por la desaparición inevitable de su pueblo y cultura frente al avance de los colonos blancos. Acepta la venta de las tierras pero pide que se respete el derecho de su gente a visitar las tumbas de sus antepasados en esas tierras, ahora sagradas para ellos.
El jefe Seattle responde a la oferta del gobierno estadounidense de comprar las tierras de su pueblo. Explica que la tierra, la naturaleza y todos sus elementos son sagrados para los indígenas, y forman parte integral de su cultura e identidad. Si bien considera la oferta, advierte que la forma de vida y concepción del mundo de los blancos es muy diferente y podría dañar el equilibrio natural.
Carta del jefe seattle al presidente de los Estados Unidosdianegasso
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Pierce de comprar las tierras de los nativos americanos en el noroeste de Estados Unidos. El Jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte de su identidad, y que venderla sería muy difícil. También advierte al presidente que si compran la tierra, los estadounidenses deben recordar que la tierra, los ríos y los animales son sagrados y están interconectados, y que el daño a la tierra traerá consecuencias.
Carta del jefe seattle al indio piel roja al presienteHeribay Escobedo
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Franklin Pierce de comprar las tierras de los nativos americanos en el noroeste de Estados Unidos. El Jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte integral de su identidad. Aunque considerará la oferta, enfatiza que la tierra debe ser tratada con respeto y que los nuevos colonos deben vivir en armonía con la naturaleza y los animales, como lo hacen los nativos americanos.
Carta del jefe seattle al presidente de los estados unidosforestales
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Pierce de comprar las tierras de su tribu en el noroeste de Estados Unidos. Expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte de su identidad, y que venderla sería como vender el cielo o el aire. Sin embargo, considerará la oferta con la condición de que los estadounidenses respeten la tierra y traten a los animales como hermanos, comprendiendo que todos están interconectados. Advirtió que si no cuidan la tierra, el destino de los blancos será
Noah Sealth, jefe indio de la tribu Duwamish, escribió una carta en 1854 en respuesta a la propuesta del presidente Franklin Pierce de crear una reserva india y comprar las tierras indias. En su carta, Noah Sealth expresa que la tierra, el agua, el aire y todos los elementos de la naturaleza son sagrados para los pueblos indígenas. Advierte al presidente que la forma de vida del hombre blanco, basada en la explotación de la tierra y los recursos naturales, conducirá a la destrucción del
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Franklin Pierce de comprar las tierras de su tribu en el noroeste de Estados Unidos. Expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte de su identidad. Acepta considerar la oferta pero con la condición de que los estadounidenses respeten la tierra y traten a los animales como hermanos, comprendiendo que todo está interconectado. Advirtió que si no cuidan la tierra, esta se volverá en su contra como ha ocurrido con otras tribus.
El jefe Piel Roja de Seattle responde a la oferta del presidente de Estados Unidos para comprar los territorios del noroeste a cambio de una reservación. Rechaza la idea de vender o comprar la tierra, que es sagrada para su pueblo. Advierte que si aceptan la oferta, el hombre blanco debe recordar que los ríos, animales, aire y tierra son sagrados, y enseñar esto a sus hijos, pues todos están interconectados. Teme que el apetito del hombre blanco destruya la tierra y deje un des
El jefe Seattle expresa en su carta al presidente de Estados Unidos que la tierra, los animales y todos los elementos de la naturaleza son sagrados para los indígenas americanos. Advierte que si los estadounidenses compran sus tierras deben recordar que son sagradas y enseñar eso a sus hijos, y deben tratar a los animales como hermanos. También expresa su temor de que el apetito de los estadounidenses destruya la tierra y deje solo un desierto.
El Jefe Seattle expresa su preocupación por la venta de las tierras de su pueblo a los Estados Unidos, ya que la tierra es sagrada para ellos. Explica que la tierra, el agua, el aire y todos los elementos de la naturaleza son parte de su cultura e identidad. Sin embargo, acepta considerar la oferta con la condición de que los estadounidenses protejan la tierra y enseñen a sus hijos a respetarla.
Este documento presenta la carta escrita por el jefe Seattle en respuesta a una oferta del presidente de Estados Unidos para comprar los territorios del noroeste del país que hoy forman el estado de Washington. En la carta, el jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y es difícil de vender. También advierte sobre los impactos negativos que podría tener la llegada de los colonos estadounidenses y la destrucción del medio ambiente natural. Finalmente, pide que se recuerde la conexión espiritual entre la tierra
El Gran Jefe Seattle dio un discurso en 1855 al ceder las tierras de los Dewamish a los colonos blancos. En su discurso, el Jefe Seattle expresa que la tierra, el agua y los animales son sagrados para su pueblo. Advierte que aunque los blancos no comprenden esta conexión espiritual con la tierra, el daño que le causen a la tierra los dañará a ellos también. El Jefe Seattle teme que el estilo de vida de los colonos destruya el equilibrio natural y lleve a su pueblo a la
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Franklin Pierce de comprar las tierras de los pueblos indígenas en el noroeste de Estados Unidos. El Jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte integral de su identidad. Acepta considerar la oferta con la condición de que los estadounidenses blancos respeten la tierra y traten a los animales como hermanos, comprendiendo que todos están interconectados. Advirtió que si no cuidan la tierra, sufrirán el mismo destino que los pueb
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce para crear una reserva india y acabar con los enfrentamientos entre indios y blancos. En su respuesta, Sealth creó el primer manifiesto en defensa del medio ambiente, argumentando que la tierra no puede comprarse o venderse ya que es sagrada para su pueblo y parte de su identidad. Sealth advirtió que el estilo de vida de los blancos destruiría la tierra y que debían aprender a vivir en armonía con ella.
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce para crear una reserva india con un manifiesto en defensa del medio ambiente. En su respuesta, Sealth expresó que la tierra, el agua y todos los elementos naturales son sagrados para su pueblo y no pueden ser comprados o vendidos. Advirtió también que la explotación sin límites de la naturaleza por parte de los colonos blancos eventualmente destruirá el medio ambiente y a la humanidad.
Noah Sealth, jefe indio de la tribu Duwamish, respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce de 1854 para crear una reserva india y comprar sus tierras con un manifiesto en defensa de la tierra y el medio ambiente. Sealth expresó que la tierra no puede comprarse porque es sagrada para su pueblo y parte de su identidad, y advirtió que el estilo de vida destructivo del hombre blanco conducirá a la destrucción de la tierra y de sí mismos si no cambian su forma de relacionarse con ella.
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce para crear una reserva india y acabar con los enfrentamientos entre indios y blancos con un manifiesto en defensa del medio ambiente y la naturaleza. En su respuesta, Sealth rechazó la idea de vender o comprar las tierras indias, que consideraba sagradas, y advirtió sobre las consecuencias de la destrucción del medio ambiente por parte de los colonos blancos.
El Gran Jefe Seattle expresa en su carta al Presidente Franklin Pierce su profundo respeto por la tierra y los recursos naturales que el pueblo Swamish considera sagrados. Aunque considera la oferta de compra de las tierras, enfatiza que la tierra, el agua, el aire y todos los seres vivos son parte de la identidad de su pueblo. Insta a los estadounidenses a recordar esta conexión sagrada con la tierra y a tratar los recursos naturales y a los animales con la misma compasión.
Carta del Jefe Seattle al presidente de los Estados Unidos.pdfCARMENALVARADO55
El jefe Seattle responde a la oferta del presidente Franklin Pierce de 1854 para comprar los territorios del noroeste de Estados Unidos. El jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte de su identidad, y que no puede ser comprada. Sin embargo, considerará la oferta con la condición de que los estadounidenses respeten la tierra y a los animales como sus hermanos.
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente Franklin Pierce de comprar las tierras de los nativos americanos en el noroeste de Estados Unidos. El Jefe Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y parte integral de su identidad. Aunque considerará la oferta, enfatiza que la tierra no puede ser comprada ni vendida. Insta a los estadounidenses a recordar la conexión sagrada entre la tierra y los pueblos indígenas, y a tratar la tierra y a los animales con el mismo respeto que a sus hermanos
En 3 oraciones o menos:
La carta del jefe indio Noah Sealth expresa su profundo respeto por la tierra y la naturaleza como parte integral de la cultura e identidad de su pueblo. Sealth rechaza la propuesta del presidente de vender las tierras sagradas de los nativos, y advierte que el estilo de vida destructivo de los colonos blancos conducirá a su propia ruina y a la de la tierra. Pide a los colonos que enseñen a sus hijos a respetar la naturaleza como lo hacen los p
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce para crear una reserva india y acabar con los enfrentamientos entre indios y blancos con un manifiesto en defensa del medio ambiente y la naturaleza. En su respuesta, Sealth rechazó la idea de vender o comprar las tierras indias, ya que cada parte de la tierra es sagrada para su pueblo y está ligada a su cultura e historia. Advirtió también que el estilo de vida del hombre blanco conducirá a la destrucción del medio
Noah Sealth, jefe indio, respondió a la propuesta del presidente estadounidense Franklin Pierce para crear una reserva india y comprar sus tierras con un manifiesto en defensa del medio ambiente. En él, Sealth explica que la tierra es sagrada para su pueblo y no puede ser comprada o vendida, pues es parte de su identidad. Advierte también sobre los impactos negativos de la forma en que los colonos blancos tratan y explotan la tierra, que conducirá a su destrucción si no cambian su perspectiva.
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente estadounidense Franklin Pierce para crear una reserva india con una carta en 1854 que constituye el primer manifiesto en defensa del medio ambiente. En la carta, Sealth explica que la tierra es sagrada para su pueblo y no puede ser comprada o vendida, y advierte que la forma en que los colonos blancos tratan la tierra conducirá a su destrucción.
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce para crear una reserva india con una carta en 1854 que constituye el primer manifiesto en defensa del medio ambiente. En ella, Sealth explica que la tierra es sagrada para su pueblo y no puede ser comprada o vendida, y advierte que la forma en que los colonos blancos tratan la tierra conducirá a su destrucción.
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce para crear una reserva india con un manifiesto en defensa del medio ambiente y la naturaleza. En su respuesta, Sealth rechazó la venta de las tierras indias, argumentando que cada parte de la tierra es sagrada para su pueblo y que el hombre blanco no comprende la relación simbiótica entre la humanidad y la naturaleza. Sealth advirtió que la destrucción del medio ambiente conduciría a la destrucción del hombre.
El jefe indio Noah Sealth respondió a la propuesta del presidente Franklin Pierce para crear una reserva india con un manifiesto en defensa del medio ambiente y la naturaleza. En su respuesta, Sealth rechazó la venta de las tierras indias, explicando que cada parte de la tierra es sagrada para su pueblo y está interconectada con la vida. Sealth advirtió que el estilo de vida destructivo del hombre blanco conduciría a su propia destrucción y a la pérdida de la armonía entre el hombre y la n
El Jefe Seattle responde a la oferta del presidente de Estados Unidos de comprar las tierras de su tribu a cambio de una reservación. Seattle expresa que la tierra es sagrada para su pueblo y está íntimamente ligada a su identidad y cultura. Reconoce que la venta es inevitable dada la fuerza del hombre blanco, pero pide que se respete la espiritualidad de la tierra y su conexión con los antepasados indígenas.
Noah Sealth, jefe indio, respondió a la propuesta del presidente estadounidense Franklin Pierce para crear una reserva india y comprar sus tierras con un manifiesto defendiendo el medio ambiente. Sealth expresó que la tierra, agua y aire no pueden comprarse porque son sagrados para su pueblo y parte de su identidad. Advirtió que la forma de vida de los colonos blancos destruirá la tierra y los recursos naturales si no aprenden a vivir en armonía con la naturaleza.
Este documento es una carta abierta escrita en 1855 por el jefe Seatle de la tribu Dwamish en respuesta a la oferta del gobierno estadounidense de comprar sus tierras. Seatle expresa que la tierra, los animales y el medio ambiente son sagrados para su pueblo. Rechaza la idea de vender o comprar la tierra, el aire o el agua. Advierte que aunque consideren la oferta, los blancos deben recordar que deben cuidar la tierra y respetarla como lo hacen su pueblo
El jefe indio Noah Sealth escribió una carta en 1854 en respuesta a la propuesta del presidente estadounidense Franklin Pierce de crear una reserva india y comprar sus tierras sagradas. En la carta, Noah Sealth describe cómo cada parte de la tierra, como los árboles, ríos, y animales, son sagrados para los indios nativos. Advierte que si los estadounidenses compran la tierra, deben recordar su sagrado significado y enseñarlo a sus hijos. Concluye que aunque los modos de vida son diferentes, los ind
El jefe indio expresa su preocupación por la propuesta del gobierno estadounidense de comprar las tierras de los indios. Explica que la tierra, los animales y los ríos son sagrados para los indios y son parte de su familia, no son mercancías que puedan comprarse o venderse. También critica el estilo de vida de los blancos y su trato de la naturaleza como un objeto que se puede explotar sin límites. Finalmente, pide a los blancos que respeten la tierra y a los animales como herman
La carta del Jefe Seattle expresa su preocupación por la venta de las tierras indígenas a los colonos estadounidenses. Explica que la tierra, los animales y los recursos naturales son sagrados para su pueblo y parte integral de su cultura e identidad. Además, advierte que el estilo de vida de los colonos no es sostenible y eventualmente conducirá a su propia destrucción y la de la naturaleza.
Este poema expresa el profundo amor y devoción del autor hacia otra persona, refiriéndose a ella como su "capitán" y deseando convertirla en su "caramelo". El poema describe cómo el autor vive y muere por esta persona, se rinde ante ella, y le pide al firmamento por los dos porque ahora ella le pertenece solo a él. Concluye expresando su deseo de caminar juntos lado a lado en su barco sin naufragar.
Este poema expresa el amor del autor por la paz y la tranquilidad que encuentra en su pareja. Describe lo feliz que lo hace la calma y la forma de ser de su amado, y que estaría dispuesto a perder incluso su amanecer con tal de permanecer a su lado sin desfallecer, porque vive y muere por él, como el dios Febo.
El poema describe la calma y la paz que la persona encuentra en los brazos de su amado después de un tiempo de intensidad y deseo. Ahora disfrutan el momento sin culpa, aprendiendo juntos el arte del amor a través de caricias y abrazos que parecen durar para siempre.
Este documento expresa el profundo amor que siente el autor por otra persona. Describe su amor como una alegría infinita y una pasión que los une. Aunque el autor es reservado con sus sentimientos, siente que ha encontrado en esta persona un refugio seguro y alguien que lo acepta tal como es. Promete brindarle a esta persona un mundo lleno de cariño, paz y armonía.
Este poema corto expresa el amor del autor por una niña a la que describe como bella y dulce. El poeta canta y ríe porque sabe que ella es solo suya y de nadie más. Expresa su deseo de que ella sepa cuánto la ama y le ofrece un ramo de rosas y su corazón.
Una hermosa muchacha y un tierno gavilán se enamoraron y emprendieron un vuelo eterno juntos por el cielo azul, perdidos en un sueño de amor intenso que los consumía como una brasa ardiente sin apagarse.
Este poema expresa el profundo amor y deseo que siente el autor hacia su amado. Describe cómo se siente protegida y reconfortada por su presencia, y cómo su mirada la hace sentir viva y despierta. Pide a su amado que cure y sane su corazón roto con besos y amor, declarando cuánto lo ama y desea.
El poema expresa el deseo del autor por abrazar y besar a la persona amada a pesar de su indiferencia. El autor se siente atraído por la sonrisa de la persona amada y desea estar entre sus brazos para amarla y respetarla.
La autora vivía engañada por un falso orgullo y miedos profundos. Una noche, al encontrarse con la mirada de alguien, no pudo resistirse y cayeron todas las barreras de su corazón. Ahora vive una maravillosa ilusión que todos llaman amor, cayó en la red de esa persona y no se queja ante un mundo perplejo.
El poema expresa el profundo amor del autor por los ojos de otra persona. Describe los ojos como aguamarina y del color del cielo, y dice que al mirar en ellos puede perderse y viajar por el firmamento. El poema sugiere que los ojos reflejan el alma cálida de la persona y que el autor daría cualquier cosa por comprar su mirada.
This poem expresses passionate love and desire between two people through imagery of kissing. It describes the speaker deriving life and pleasure from kissing their lover's mouth, which tastes of peaches and ripe fruit. Their lips finding eternal union and rediscovery in each moment's height of passion. The speaker declares their mouth belongs to their lover and vice versa, openly professing their love after their mouths have come to intimately know one another in a way that has stripped away innocence. They beg their lover not to let them die, but rather keep giving them life through their kisses.
El poema describe el primer beso entre el poeta y su amado/a. El beso fue dulce y suave, surgiendo de manera natural desde el corazón y convirtiéndose en una caricia compartida. A pesar de las dificultades que puedan surgir, su amor perdurará para siempre.
Este poema describe a un alma que le ruega a su genio durante una tormenta, pidiéndole que no se aleje y que ilumine su amor para siempre. A pesar de que son opuestos, el alma ve al genio como su dios y le pide su bendición.
Este poema expresa el amor profundo entre dos personas que se observan y necesitan mutuamente, seducidos por la belleza del otro. Aunque juegan a seducirse, en realidad son una sola persona unida por besos y caricias en la intimidad de su amor, del cual la persona que habla ya se enamoró completamente.
El poema habla sobre cantar desde el corazón a la vida y pedirle amor y una nueva oportunidad para estar con la persona amada. El autor canta imaginando bailar muy juntos y enamorados para borrar los errores pasados y demostrar que la persona amada es todo lo que desea.
Este documento proporciona instrucciones para hacer "pan relleno" para dos panes. Incluye una lista de ingredientes como harina, huevos, margarina, mayonesa, mostaza, jamón, queso y aceitunas. Las instrucciones detallan cómo amasar la masa, estirarla en rectángulos, untarlos con mayonesa y mostaza, y colocar jamón, queso y aceitunas antes de enrollarlos y hornearlos durante una hora.
La persona recuerda a su amado del pasado como un jilguero silencioso, pero el tiempo y la vida los llevaron por caminos separados y ahora ella se siente solitaria. Aún desea volar con su amado jilguero hacia tierras inexploradas, posarse en la rama y no temerle a nada.
Este poema expresa el amor profundo del autor por otra persona a través de la descripción de pequeños detalles físicos y emocionales que necesita de ella, como un retazo de su piel, su aliento, perfume, mirada, energía y parte de su corazón y alma, especialmente sus ojos negros que desea mirar eternamente.
La fase luminosa, fase clara, fase fotoquímica o reacción de Hill es la primera fase de la fotosíntesis, que depende directamente de la luz o energía lumínica para poder obtener energía química en forma de ATP y NADPH, a partir de la disociación de moléculas de agua, formando oxígeno e hidrógeno.
El Medio Ambiente(concientizar nuestra realidad)govesofsofi
Este pequeño trabajo tiene como intención concientizar sobre el medio ambiente...menciona las "famosas" islas de basuras y unos jóvenes que intentaron cambiar la realidad de la contaminación, pero como sabemos...no basta con uno o dos para poder lograr grandes cambios, se necesita de todos para poder lograr los. Roma no fue grande a causa de una sola persona...
Minerales en la tierra (corteza terrestre y océanos)
Carta swamish-word
1. n 1854, el Presidente de los Estados Unidos de América, Franklin Pierce,
hizo una oferta por una gran extensión de tierras en el noreste de los
Estados Unidos, en la que vivían los indios Swamish, ofreciendo en
contrapartida crear una reserva para el pueblo indígena. La respuesta
del Jefe indio Seattle, que trascribimos a continuación, ha sido
considerada, a través del tiempo como uno de los más bellos y
profundos manifiestos a favor de la defensa del medio ambiente.
l Gran Jefe de Washington envió palabra de que desea
comprar nuestra tierra. El Gran Jefe nos envía también
palabras de amistad y buena voluntad. Apreciamos
mucho esta delicadeza porque sabemos la poca falta que le hace
nuestra amistad. Vamos a considerar su oferta, pues sabemos que, de no
hacerlo, el hombre blanco vendrá con sus armas de fuego y tomará
nuestras tierras. El Gran Jefe de Washington puede confiar en la palabra
del Gran Jefe Seattle, con la misma certeza que confía en el retorno de
las estaciones. Mis palabras son inmutables como las estrellas del
firmamento.
¿Cómo se puede comprar o vender el cielo o el calor de la tierra?, esta
idea nos parece extraña. Si no somos dueños de la frescura del aire, ni
del brillo del agua, ¿Cómo podrán ustedes comprarlos? Cada pedazo de
esta tierra es sagrado para mi pueblo, cada aguja brillante de pino, cada
grano de arena de las riberas de los ríos, cada gota de rocío entre las
E
E
2. sombras de los bosques, cada claro en la arboleda y el zumbido de cada
insecto son sagrados en la memoria y tradiciones de mi pueblo. La savia
que recorre el cuerpo de los árboles lleva consigo los recuerdos del
hombre piel roja. Los muertos del hombre blanco olvidan la tierra donde
nacieron cuando emprenden su paseo por entre las estrellas, en cambio
nuestros muertos, nunca pueden olvidar esta bondadosa tierra, pues ella
es la madre del hombre piel roja. Somos parte de la tierra y ella es parte
de nosotros. Las flores perfumadas son nuestras hermanas, el venado, el
caballo, el gran águila, todos son nuestros hermanos. Las escarpadas
montañas, los húmedos prados, el calor de la piel del potro y el hombre,
todos pertenecemos a la misma familia. Por esto, cuando el Gran Jefe
Blanco de Washington manda decir que desea comprar nuestra tierra,
pide mucho de nosotros. El Gran Jefe Blanco nos dice que nos reservará
un lugar donde podamos vivir cómodamente. Él se convertirá en nuestro
padre y nosotros en sus hijos. Por lo tanto, nosotros vamos a considerar
su oferta de comprar nuestra tierra. Pero eso no es fácil, ya que esta
tierra es sagrada para nosotros.
Esta agua cristalina que escurre por los riachuelos y corre por los ríos no
es solamente agua, sino también la sangre de nuestros antepasados. Si
les vendemos la tierra, ustedes deberán recordar que ella es sagrada, y
deberán enseñar a sus hijos que ella es sagrada y que los reflejos
misteriosos sobre las aguas claras de los lagos hablan de
acontecimientos y recuerdos de la vida de mi pueblo. El murmullo del
agua de los ríos es la voz del padre de mi padre. Los ríos son nuestros
hermanos, ellos calman nuestra sed. Los ríos llevan a nuestras canoas y
nos dan peces para alimentar a nuestros hijos. Si les vendemos nuestras
tierras, ustedes deberán recordar y enseñar a sus hijos que los ríos son
3. nuestros hermanos y también los suyos, y por tanto deberéis tratar a los
ríos con la misma dulzura con que se trata a un hermano. Sabemos que
el hombre blanco no comprende nuestro modo de vida. Tanto le importa
un trozo de nuestra tierra como otro cualquiera, pues es un extraño que
llega en la noche a arrancar de la tierra aquello que necesita. La tierra
no es su hermana, sino su enemiga y una vez conquistada la abandona, y
prosigue su camino dejando atrás la tumba de sus padres sin importarle
nada. Roba a la tierra aquello que pertenece a sus hijos y no le importa
nada. Tanto la tumba de sus padres como los derechos de sus hijos son
olvidados. Trata a su madre, la tierra y a su hermano, el cielo, como
cosas que se pueden comprar, saquear y vender, como si fuesen
corderos o collares que intercambian por otros objetos. Su hambre
insaciable devorará todo lo que hay en la tierra y detrás suyo dejarán tan
sólo un desierto. Yo no entiendo, nuestro modo de vida es muy diferente
al de ustedes. La sola vista de sus ciudades apena los ojos del piel roja.
Tal vez sea porque el hombre piel roja es un salvaje y no comprende
nada.
No existe un lugar tranquilo en las ciudades del hombre blanco, ni hay
sitio donde escuchar cómo se abren las flores de los árboles en
primavera, o el movimiento de las alas de un insecto. Pero quizás
también esto se deba a que soy un salvaje que no comprende bien las
cosas. El ruido de las ciudades parece insultar los oídos. Y yo me
pregunto, ¿qué tipo de vida tiene el hombre si no puede escuchar el
canto solitario del chotacabras, ni las discusiones nocturnas de las
ranas al borde de un lago? Soy un piel roja y nada entiendo. Nosotros
preferimos el suave susurro del viento sobre la superficie del lago, así
como el olor de ese mismo viento purificado por la lluvia del mediodía, o
4. perfumado por la fragancia de los pinos. El aire es algo precioso para el
piel roja, ya que todos los seres comparten el mismo aliento, el animal,
el árbol, el hombre, todos respiramos el mismo aire. El hombre blanco no
siente el aire que respira, como un moribundo que agoniza durante
muchos días es insensible al hedor. Si les vendemos nuestras tierras
deben recordar que el aire es precioso para nosotros, que el aire
comparte su espíritu con la vida que sostiene. El viento que dio a
nuestros antepasados el primer soplo de vida, también recibió de ellos
su último suspiro. Si les vendemos nuestras tierras, ustedes deberán
conservarlas sagradas, como un lugar en donde hasta el hombre blanco
pueda saborear el viento perfumado por las flores de las praderas.
Queremos considerar su oferta de comprar nuestras tierras. Si
decidimos aceptarla, yo pondré una condición: el hombre blanco debe
tratar a los animales de esta tierra como a sus hermanos. Soy un salvaje
y no comprendo otro modo de vida. He visto miles de búfalos
pudriéndose en las praderas, abandonados allí por el hombre blanco que
les disparó desde el caballo de hierro sin ni tan solo pararlo. Yo soy un
salvaje y no comprendo cómo el humeante caballo de hierro pueda
importar más que el búfalo al que nosotros sólo matamos para poder
vivir. ¿Qué sería del hombre sin los animales? Si todos los animales
fuesen exterminados, el hombre también perecería de una gran soledad
de espíritu, pues lo que ocurra a los animales pronto habrá de ocurrirle
también al hombre. Todas las cosas están relacionadas entre sí. Deben
de enseñarles a sus hijos que el suelo que pisan son las cenizas de
nuestros antepasados. Digan a sus hijos que la tierra está enriquecida
con las vidas de nuestro pueblo, a fin de que sepan respetarla. Es
necesario que enseñen a sus hijos, lo que nuestros hijos ya saben, que la
tierra es nuestra madre. Todo lo que ocurra a la tierra, le ocurrirá
5. también a los hijos de la tierra. Cuando los hombres escupen en el suelo,
se están escupiendo a sí mismos. Esto es lo que sabemos: la tierra no
pertenece al hombre, es el hombre el que pertenece a la tierra. Esto es
lo que sabemos: todas las cosas están ligadas como la sangre que une a
una familia. El sufrimiento de la tierra se convertirá en sufrimiento para
los hijos de la tierra. El hombre no ha tejido la red que es la vida, sólo es
un hilo más de la trama. Lo que hace con la trama se lo está haciendo a
sí mismo. Nuestros hijos han visto cómo sus padres eran humillados
mientras defendían su tierra. Nuestros guerreros han sentido vergüenza,
y ahora pasan sus días ociosos, mientras contaminan sus cuerpos con
comida dulce y agua de fuego. Importa poco dónde pasaremos el resto
de nuestros días, no son demasiados. Unas pocas horas, unos pocos
inviernos y ninguno de los descendientes de las grandes tribus que
alguna vez vivieron sobre esta Tierra, estarán aquí para lamentarse
sobre las tumbas de una gente que un día tuvo poder y esperanza. Ni
siquiera el hombre blanco, cuyo Dios pasea y habla con él de amigo a
amigo, quedará exento del destino común. Quizás seamos hermanos a
pesar de todo, ya se verá algún día. Sabemos una cosa que quizás el
hombre blanco tal vez descubra algún día, el Dios nuestro y el de
ustedes es el mismo Dios. Ustedes creen que Dios les pertenece, de la
misma manera que desean que nuestras tierras les pertenezcan, pero no
es así. Él es el Dios de todos los hombres y su compasión se extiende
por igual entre los pieles rojas y los caras pálidas. Esta tierra es
preciosa, y despreciarla es despreciar a su Creador y se provocaría su
irá. También los blancos se extinguirán, quizás antes que todas las otras
tribus. Contaminan sus lechos y una noche perecerán ahogados en sus
propios desechos. Ustedes caminan hacia su destrucción rodeados de
gloria, inspirados por la fuerza del Dios que los trajo a esta tierra y que
6. por algún designio especial les dio dominio sobre ella y sobre el piel roja.
Ese destino es un misterio para nosotros, pues no entendemos por qué
se exterminan los búfalos, se doman los caballos salvajes, se impregnan
los rincones secretos de los densos bosques con el olor de tantos
hombres y se obstruye la visión del paisaje de las verdes colinas con un
enjambre de alambres de hablar.
¿Dónde está el matorral? Destruido.
¿Dónde está el águila? Desapareció.
Es el final de la vida y el inicio de la supervivencia.