El documento establece nuevas pautas para la evaluación del rendimiento profesional en las Unidades de Gestión Clínica. Ahora, cada unidad tendrá objetivos corporativos comunes (60%) y objetivos específicos (40%) acordados con la dirección del centro. La evaluación individual dependerá de la contribución a los objetivos de la unidad en función del área de conocimiento, y será realizada por el director de la unidad. Los remanentes se repartirán si se alcanza el 60% de los objetivos tanto del equipo como del profesional