Este documento habla sobre el uso de redes sociales durante emergencias y desastres. Explica que las redes sociales pueden ser una fuente rápida y viral de información, pero también de rumores. Recomienda designar un portavoz oficial único para proveer información precisa y oportuna que ayude a combatir la desinformación. También sugiere monitorear hashtags clave, desmentir rumores con pruebas y pedir apoyo de influencers para detener la propagación de información falsa.