Este documento expresa el descontento de una empresa con la cobertura de un accidente por parte de los medios de comunicación locales. Critica que los medios publicaron detalles incorrectos sin verificar los hechos con el único fin de ganar audiencia. También aclara que la conductora involucrada no se dio a la fuga, sino que perdió el control del vehículo debido al accidente. La empresa priorizó la asistencia a los damnificados por sobre realizar declaraciones públicas.

1. EL NEGOCIO DE LA VERDAD
Ante los acontecimientos sucedidos el pasado miércoles 10 de julio, y el injusto trato
recibido por parte de la prensa, hoy hacemos valer nuestros derechos.
Nos comunicamos hacia la sociedad mendocina para transmitirles que es lamentable el ver
como medios, que solamente en búsqueda de un titular que les genere más ventas,
seguidores y audiencia; sin el mínimo cuidado y con una liviandad inimaginable, plagan sus
noticias de datos y hechos que no sucedieron como ellos lo retratan.
Ese amarillismo innecesario del que todos están acostumbrados, lo único que provoca es
generar conceptos errados por parte de la población hacia sus propios ciudadanos, sin
prever las consecuencias que esto puede llegar a causar, sin ningún temor de generar
daños y perjuicios hacia personas de buena fe.
Los hechos sucedidos durante el lamentable accidente del cual participó la señora de
Millán, no fueron narrados de la forma más objetiva por los diversos medios de
comunicación. Las declaraciones y peritajes se encuentran en su respectiva dependencia
gubernamental a disposición de las autoridades pertinentes y de quien quiera saber la
verdad.
Todo profesional de la comunicación debe perseguir como fin último el contar los hechos de
la manera más certera posible; el no hacerlo transforma una profesión en un simple juego
con reglas difusas. Es por eso que es lamentable que la verdad quede relegada
sencillamente a los beneficios económicos de ciertos grupos.
Se mencionaron actos como el que la conductora del vehículo se dió a la fuga, cuando a
escasos metros, el automóvil culminó incrustado debajo de un colectivo como consecuencia
de la total pérdida de dominio producido ante tal hecho.
Si no se realizó un comunicado previo, fue para no participar ni avalar el amarillismo de la
prensa local. Desde el primer momento, el cuidado de los damnificados fue nuestra
prioridad. Regularizada la situación, todo aquello que se encuentre a nuestro alcance en
defensa de este acto injusto, será realizado en las sedes correspondientes.
Asimismo, agradecemos a ese pequeño grupo de personas que aún defiende el periodismo
real y toda aquella persona que nos brindó su apoyo ante el difícil momento que nos ha
tocado vivir.
Familiares y personal perteneciente a Millán S.A.