El documento trata sobre dos tipos de contaminación: la contaminación sónica y la contaminación del suelo. La contaminación sónica se refiere al exceso de sonido que altera el ambiente normal y puede tener efectos auditivos, interferir la comunicación y causar depresión y ansiedad. La contaminación del suelo implica la presencia de compuestos químicos hechos por el hombre o alteraciones ambientales y puede ocurrir por plaguicidas, derrames de petróleo, minería, erosión, incendios forestales o desertificación.