Adoptando hábitos sencillos como ahorrar energía y reducir la contaminación, cada persona puede ayudar a proteger el planeta para las futuras generaciones. Desde 1970, el Día de la Tierra ha unido esfuerzos mundiales para cuidar el medio ambiente y construir un futuro más saludable. Si no tomamos acciones para reducir el calentamiento global causado por nuestras emisiones, nuestros hijos tendrán que vivir en un planeta muy diferente.