Este documento narra la historia de un trozo de madera que deriva por los mares del Ártico y del Atlántico Norte, pasando por diferentes puertos y costas de Escandinavia, Escocia, Portugal y finalmente Nueva York. Es recogido por una mujer llamada Lillian en un barco de sus sueños y se rompe al llegar a destino, dejando un mensaje.
3. En el
principio
En las frías aguas del mar
de Barents, que bañan el
archipiélago de Svalbard;
navegaba a bordo del viejo
bacaladero “XAXAN” por el
paralelo 76.
Estrellas iluminando el
puente de mando, luces
semi apagadas, y niebla
discordante.
La noche se despierta en
la inmensidad marina.
Oleaje intenso.
Distorsión ambiental.
4. Cap 1
El veterano capitán Jandro Vietez ,
que había estado los últimos días
muy pensativo, tratando descubrir a
donde se había marchado la pesca
que en esas coordenadas, en mareas
pasadas, había conseguido copos
extraordinarios .
5. Se acerca taciturno y sin mediar
palabra, inesperadamente, me
arroja por la borda hacia las
agitadas y negras aguas que
golpean sobre el casco del barco
con furia exagerada.
6. Las corrientes que se deslizan
bordeando la península escandinava me
llevan a su merced. Pasadas varias
semanas me encuentro descansando en las
grises costas de Godhavn.
Sorprendentemente, de este puerto,
partió en su barco “Gjöa”, el
explorador noruego Roald Amundsen en
busca del Paso del Noroeste.
7. Cap 2
No puedo recordar cuanto tiempo
pase aqui.
Las corrientes que azotan
estas costas me arrastra
hacia el mar del Gran sol.
En mi ruta me cruzo con
pesqueros que faenan en estas
aguas y que me obligan a
derivar constantemente.
Al fin me depositan en la
bahía de Glasgow .
8. Aquí descansa, esperando zarpar
hacia una nueva singladura la
corbeta “Glenlee”, que será más
tarde comprada por el gobierno
español y rebautizada como “El
Galatea” y tendrá su base en
Ferrol.
Será destinada junto con su gemelo el
“Juan Sebastián el Cano”, como buque
escuela
9. Cap 3
El invierno fue tremendamente duro este
año, con temporales de fuerza siete. Con
la llegada de la primavera las aguas se
volvieron más templadas lo que provocó
fuertes corrientes en superficie. Me
desplazo bastante rapido.
10. El limo y las abundantes algas
que cubrían las rocas, frenó mi
varáda en las rocas que
resguardan el “museo de Man” en
Camelle”.
Estaba na “Costa da Morte”.
11. Cap 4
En aquella estación la
luna estaba llena.
Con la llegada de la
bajamar, abandono mi
baradero y de nuevo soy
transportado por un lento
pero continuo oleaje que
me hacen adentrarme en las
más agitadas aguas del
Atlántico.
12. Presiento que navego frente
a una costa dura y
escarpada , sin muchos
puertos de abrigo. Quizá la
temida costa portuguesa.
Tras interminables jornadas
navegando a la deriva, las
olas me depositan sobre una
playa de arenas limpias y
aguas cristalinas.
Estoy en la Graciosa.
13. Siento sus manos suaves y me dejo
Cap 5
llevar en sus dulces y delicados
brazos.
Su embelesada belleza me arrastra
al camarote de su embarcación.
Era un schooner llamado “Twister”. De
doble mástil, 29 metros de eslora ,
6,20 m de manga y un botalón con dos
foques.
El casco es de madera de cedro rojo y
cubierta de teca.
14. Era el barco con el que siempre
había soñado.
Comenzaba el otoño y los alisios
estaban soplando con fuerza
constante.
En 4 semanas cruzamos el Atlántico.
15. Amanecía con frío en Nueva
York, cuando largamos el cabo
de proa para amarrarnos.
Me resbalo entre sus
temblorosas manos y rompo en
mil pedazos.
Los cristales se esparcen por
todo el camarote.
16. Lillian leyó el mensaje,
escrito con una cuidada
caligrafía
“Por fin has llegado a tu
Destino”
y recogió mi alma reflejada en
forma de película.
Walter el marido de Lilllian y
Salvador su amigo, me dieron la
eternidad para permanecer