La deuda pública de México aumentó un 12.4% hasta alcanzar los 407,691 millones de dólares al cierre de agosto de 2012, debido principalmente al incremento de la deuda interna que representó el 81.1% del total. Los ingresos presupuestarios crecieron un 10% entre enero y agosto, impulsados por un aumento del 8.5% en los ingresos petroleros, mientras que los gastos aumentaron un 8.4% en el mismo periodo.