El primer disco duro fue inventado por IBM en 1956 y se llamó RAMAC 305. Consistía en 50 discos de aluminio que giraban rápidamente y podía almacenar hasta 5 megabytes de datos. A lo largo de las décadas siguientes, los discos duros aumentaron en capacidad, velocidad y disminuyeron en tamaño, con hitos como la introducción del formato de 3.5 pulgadas por Sony en 1982. Actualmente existen varios tipos de conexión como IDE, SATA, SCSI y SAS.