Baldini y su compañero se sientan alrededor del fuego de una caldera, fascinados por las llamas. A Baldini le gusta ver el fuego y oír los sonidos porque le recuerdan el pasado. Iba a buscar vino para beber, otra cosa que le recordaba el pasado. Luego empieza a contar historias interminables sobre su participación en la Guerra de Sucesión española, ayudando a los camisards y sobre un incendio forestal que casi provocó, entre otras historias de destilaciones y su aprendizaje como