2. ¿QUE ES EL CINE MUDO?
El cine mudo es aquel cine que no posee sonido grabado
y sincronizado, referido especialmente a diálogo
hablado, consistiendo únicamente en imágenes.
La idea de combinar las imágenes con sonido grabado es
casi tan antigua como la cinematografía en sí, pero hasta
finales de los ' 20, la mayoría de las películas eran mudas.
Este período anterior a la introducción del sonido se
conoce como la "era muda" o el "período silente".
Después del estreno de la película El cantante de jazz, las
películas habladas fueron cada vez más habituales y diez
años después, el cine mudo prácticamente había
desaparecido. La era del cine mudo a menudo es referida
como "La Edad de la Pantalla de Plata"
3. HISTORIA
La primera película muda fue creada por Louis Le Prince en 1888. Era un filme de dos
segundos que mostraba a dos personas caminando alrededor del jardín roundhay
garden, se tituló La escena del jardín de Roundhay.
El arte de la cinematografía alcanzó su plena madurez antes de la aparición de las
películas con sonido, a finales de los años 20. Muchos eruditos sostienen que la
calidad estética del cine disminuyó durante varios años hasta que directores, agentes y
el personal de producción se adaptaron al nuevo "cine sonoro". La calidad visual de las
películas mudas -especialmente las producidas durante los años 20- era a menudo
muy alta. Sin embargo, hay una falsa y muy frecuente idea, de que estas películas eran
primitivas y de mala calidad comparadas con los estándares modernos. Esta falsa
concepción es debido a que tales películas presentaban errores técnicos (tales como
películas reproducidas a velocidad incorrecta) y debido al deterioro de muchas
películas mudas (muchas grabaciones existen solamente gracias a las copias de
segunda o incluso tercera generación que se hicieron, debido a que el filme original
estaba ya dañado y descuidado).
Los pueblos pequeños tenían un piano para acompañar las proyecciones. Pero las
grandes ciudades tenían su órgano, o incluso una orquesta completa, la cual podía
ejecutar algunos efectos sonoros
4. VELOCIDAD EN LA PROYECCIÓN
• La mayoría de las películas mudas fueron filmadas en Francia a velocidades más lentas que las
películas con sonido (normalmente de 16 a 20 fotogramas por segundo frente a 24), así que a
menos que se apliquen técnicas especiales para mostrarlas a sus velocidades originales pueden
parecer artificialmente rápidas, lo que remarca su aspecto poco natural. No obstante, algunas
películas mudas fueron filmadas a menor velocidad de manera intencionada para así acelerar la
acción; esta forma de estilización se hizo preferentemente con las comedias.
• En los años previos a la introducción del sonido se filmaron literalmente miles de películas
mudas, pero un número considerable de ellas (algunos historiadores estiman que entre el 80 y el
90 por ciento) se han perdido para siempre. Las películas de la primera mitad del Siglo XX se
grabaron en rollos de película de nitrato, que era inestable, altamente inflamable, y requería de una
conservación cuidadosa para evitar que se descompusiera con el tiempo. La mayoría de estas
películas no fueron conservadas; con los años, las filmaciones se convirtieron en polvo. Muchas de
ellas fueron recicladas, y un número importante fueron destruidas en incendios. Por este motivo la
conservación de películas ha sido una prioridad entre los historiadores de películas.
• Varios cineastas han prestado homenaje a las comedias de la era muda, incluyendo a Jacques Tati
con su Las vacaciones de M. Hulot (1953), Jerry Lewis con El botones (1960), Mel Brooks que
protagonizó La Última Locura (1976), Maurizio Nichetti con Ratataplan (1979), Tricicle con Palace
(1995), Eric Bruno Borgman con The Deserter (2004) y Michel Hazanavicius con The Artist (2011).
5. TECNICAS DE ACTUACIÓN
• El cine mudo requería un mayor énfasis en el lenguaje corporal y en
la expresión facial, para que la audiencia pudiera comprender mejor
lo que un actor estaba representando en la pantalla. Vistas
retrospectivamente, algunas películas de la era muda pueden
resultar extrañas, ya que puede dar la impresión que los actores
sobreactúan de manera exagerada. Debido en parte a esto, las
comedias mudas tienden a ser más populares actualmente que los
dramas, porque la sobreactuación resulta más natural en una
comedia. No obstante, en algunas películas mudas las actuaciones
son más sutiles, dependiendo del director y de la habilidad de los
actores. La sobreactuación era un hábito que los actores
frecuentemente arrastraban de la escena teatral, y los directores
más familiarizados con el nuevo medio la desalentaban
6. COLOR EN EL CINE MUDO
• La inmensa mayoría de las películas en la etapa del cine mudo entre 1895 y 1927 estaban rodadas en
blanco y negro. Sin embargo, ya desde el principio muchos cineastas se esforzaron por intentar dotar de
color a las filmaciones. Así, Georges Melies tenía un equipo de obreras que pintaban a mano los
fotogramas de sus películas, logrando así que en la filmación se vieran en color.3 Lo más habitual sin
embargo era otro estilo de color en esta etapa, por el cual se sumergía segmentos completos de película o
la película completa, en tinte de un determinado color, lo que daba a la película en la filmación ese tono
de color, sin perder la monocromía. Para mediados de los años veinte, se había desarrollado en la industria
del cine todo un código de colores según el tipo de escenas que se estuvieran mostrando. Así, las escenas
nocturnas solían teñirse de azul oscuro o verde, por ejemplo, y otros escenarios tenían otros colores. La
elección de estos colores era tan importante, que en el rodaje solía identificarse en la claqueta además del
número de toma, el color con el que debía teñirse en postproducción lo que se estaba rodando. Además
de estas formas de coloración artificial, la compañía Technicolor comenzó a dar sus primeros pasos en el
rodaje en color natural en la etapa del cine mudo, y así estrenó su primer rudimentario proceso de color
en 1917, para la película The Gulf Between, la primera película filmada en color en Estados Unidos, de la
cual no se conservan más que algunos fotogramas. El resultado no fue satisfactorio y habría que esperar a
1922 para que el proceso se perfeccionara y continuaran realizandose películas o fragmentos de películas
en color, utilizando el proceso de Technicolor "de dos tiras", que utilizaba dos colores básicos en lugar de
tres como el Technicolor moderno, y que por tanto no podía reproducir el 100% del espectro de color.
Clásicos del cine mudo como Los diez mandamientos (1923), The Phantom of the Opera (1925) o Ben-Hur
(1925) contenían escenas rodadas en color. El proceso de Technicolor continuó utilizándose más allá del
cine mudo durante los primeros años del cine sonoro hasta que la Gran Depresión redujo el número de
rodajes al mínimo y volvió a estandarizarse durante algunos años más el blanco y negro. Después en los
años cuarenta, los estudios se desentendieron de estas filmaciones en color y Technicolor para hacer sitio
en sus almacenes destruyó los negativos de las filmaciones, provocando que la mayoría de películas en
color de este periodo se perdieran o sólo se conservaran copias en blanco y negro.