Los niños descubren un hermoso jardín para jugar después de la escuela, pero el gigante egoísta que es el dueño se enoja al verlos y les ordena irse. El lector debe elegir entre abrir el jardín para que los niños puedan seguir jugando o cerrarlo para siempre. Si se elige abrirlo, el gigante deja de ser egoísta y se vuelve amigo de los niños, pero si se elige cerrarlo, el gigante muere solo lamentando su decisión mientras los niños lloran su muerte.