El Gran Tiburón Blanco es una especie en peligro de extinción. Puede medir hasta 6 metros y pesar 1200 kg, alimentándose de peces, aves, tortugas y otros tiburones. Su reproducción es escasa, teniendo entre 4-10 crías cada 2 años. Sus poblaciones han disminuido debido a la pesca, ya sea deportiva o comercial, poniéndolo en peligro de desaparecer.