El documento resume varias afirmaciones controvertidas sobre el número de víctimas judías durante el Holocausto. Afirma que la cifra de 6 millones de judíos asesinados es exagerada y que algunos de los sitios de exterminio como Auschwitz no fueron usados para gasear judíos. También cuestiona el testimonio de sobrevivientes famosos como Elie Wiesel y Simon Wiesenthal.