Antes del dominio del dólar en EE.UU., las primeras colonias utilizaban diversos productos como maíz, tabaco y bacalao como moneda, los cuales llegaron a ser declarados como moneda de curso legal. Tras la Guerra de Independencia, el presidente Benjamín Franklin propuso imprimir billetes de papel para pagar los costos de la guerra, dando inicio al dólar estadounidense moderno.