El documento describe varios olivos centenarios y milenarios en Cataluña. Algunos de estos árboles tienen formas curiosas en sus retorcidos troncos, como la cabeza de un dragón. El olivo más famoso es Lo Parot en Horta de San Joan, que tiene más de 1000 años. Aunque la mayoría están en propiedades privadas, algunos como Lo Parot se han protegido con vallas para que el público pueda visitarlos de cerca.