El paracaidismo, parapente y otros deportes de vuelo extremo permiten a los humanos experimentar el vuelo. Estas actividades se originaron de prácticas militares donde los soldados se lanzaban de aviones para caer, pero ahora permiten volar con el propio cuerpo. Aunque existen riesgos, el equipo y la supervisión de expertos buscan maximizar la seguridad para que cualquiera pueda disfrutar de esta experiencia única.