El documento discute los costos del silencio en el lugar de trabajo. Sostiene que las personas a menudo prefieren no hablar abiertamente sobre problemas organizacionales o interpersonales por temor a las consecuencias, pero que esto genera emociones negativas y una "espiral de silencio". Propone que para romper esta espiral, todos en la organización deben esforzarse por hablar con claridad en lugar de reprimir sus diferencias.