El documento define la energía limpia como aquella que se produce sin contaminación ni residuos peligrosos. Describe cuatro tipos principales de energía limpia: la energía eólica que se obtiene de los aerogeneradores, la energía solar a partir de la radiación solar, la energía hidráulica aprovechando la energía cinética del agua, y la energía geotérmica extraída del calor del interior de la Tierra.