El sacerdote fue entrevistado sobre su vida y trabajo en Peal. Tiene más de 50 años, nació en un pueblo cercano y fue ordenado sacerdote hace 30 años. Ha servido en varias parroquias y se siente cómodo en Peal. Disfruta de vacaciones cortas y le gustaría hacer mejoras en la iglesia. En general, se siente feliz en su vocación a pesar de algunos momentos difíciles, y se enfoca en enseñar el camino a Dios y en el bienestar de los niños de la comunidad.