Historia de la Epidemiologia, se muestra una breve introducción a la historia de la epidemiologia desde Hipócrates hasta nuestra actualidad, además el documento contiene una pequeña actividad para realizar después de clases, facilitando el aprendizaje funcional de los alumnos sobre generalidades de epidemiologia
Historia de la Epidemiologia, se muestra una breve introducción a la historia de la epidemiologia desde Hipócrates hasta nuestra actualidad, además el documento contiene una pequeña actividad para realizar después de clases, facilitando el aprendizaje funcional de los alumnos sobre generalidades de epidemiologia
La mycoplasmosis aviar es una enfermedad contagiosa de las aves causada por bacterias del género Mycoplasma. Esencialmente, afecta a aves como pollos, pavos y otras aves de corral, causando importantes pérdidas económicas en la industria avícola debido a la disminución en la producción de huevos y carne, así como a la mortalidad.
1891 - 14 de Julio - Rohrmann recibió una patente alemana (n° 64.209) para s...Champs Elysee Roldan
El concepto del cohete como plataforma de instrumentación científica de gran altitud tuvo sus precursores inmediatos en el trabajo de un francés y dos Alemanes a finales del siglo XIX.
Ludewig Rohrmann de Drauschwitz Alemania, concibió el cohete como un medio para tomar fotografías desde gran altura. Recibió una patente alemana para su aparato (n° 64.209) el 14 de julio de 1891.
En vista de la complejidad de su aparato fotográfico, es poco probable que su dispositivo haya llegado a desarrollarse con éxito. La cámara debía haber sido accionada por un mecanismo de reloj que accionaría el obturador y también posicionaría y retiraría los porta películas. También debía haber sido suspendido de un paracaídas en una articulación universal. Tanto el paracaídas como la cámara debían ser recuperados mediante un cable atado a ellos y desenganchado de un cabrestante durante el vuelo del cohete. Es difícil imaginar cómo un mecanismo así habría resistido las fuerzas del lanzamiento y la apertura del paracaídas.
2. 1
Módulo 1. Introducción e Historia de la Epidemiología
1. Introducción a la Epidemiología. Generalidades
La Epidemiología estudia los procesos de salud y enfermedad que afectan a la población.
Se interesa por conocer las características de los grupos que se ven afectados; cómo se distribuyen
geográficamente y en el tiempo los eventos de salud y enfermedad; con qué frecuencia se manifiestan
y cuáles son las causas o factores asociados a su surgimiento.
El término "Epidemiología" proviene del griego, donde "epi" significa arriba, "demos": pueblo y "logos":
estudio o tratado.
Esto implica que la Epidemiología es el estudio que se efectúa sobre el pueblo o la comunidad,
en lo referente a los procesos de Salud y Enfermedad.
Existen numerosas definiciones sobre la Epidemiología, se tomará la de la Organización Mundial de
la Salud:
La Epidemiología es el estudio de la distribución y los determinantes de estados o eventos (en
particular de enfermedades) relacionados con la salud y la aplicación de esos estudios al
control de enfermedades y otros problemas de salud (OMS).
Hay diversos métodos para llevar a cabo investigaciones epidemiológicas: la vigilancia y los estudios
descriptivos se pueden utilizar para analizar la distribución, y los estudios analíticos permiten analizar
los factores determinantes.
Se podría decir que sus principales propósitos son
● La descripción del estado de salud de la población (caracterizando las frecuencias relativas de
las enfermedades y sus tendencias)
● El intentar explicar las posibles causas de las enfermedades poblacionales. ¿Qué las provoca?
¿Qué influye en su desarrollo?
3. 2
● Tratar de predecir las enfermedades que ocurrirán.
● Buscar prolongar la vida por medio de estrategias útiles para el control de las enfermedades y
su prevención en las poblaciones en riesgo.
En referencia a sus aplicaciones, entre otras estas son:
● La identificación de necesidades o problemas relevantes
● La Identificación de prioridades en Salud
● La Identificación de las causas de un evento
● La Medición de riesgos ante exposiciones peligrosas
● La evaluación de:
- La efectividad de una medida de prevención o un tratamiento
- Las necesidades y tendencias de los Servicios de Salud
- El impacto de las actividades realizadas sobre el sujeto, el medio ambiente y las
condiciones de vida
Entre sus campos de acción se pueden mencionar algunos de ellos:
● Los Estudios de la situación de Salud (ASIS) en diferentes grupos de población y sus
determinantes
● La Vigilancia Epidemiológica de las enfermedades y otros problemas de salud o eventos
positivos de salud
● La Investigación de los determinantes de la salud y la explicación de los problemas prioritarios
● La Evaluación de los servicios de salud y de las acciones o intervenciones en las
poblaciones, así también como la valoración del ambiente, de las condiciones de vida y de la
tecnología en la salud
4. 3
Gráficamente:
En síntesis: la Epidemiología permite identificar necesidades o problemas relevantes en salud, las
causas de un nuevo síndrome; medir los riesgos asociados con exposiciones peligrosas; determinar la
efectividad de una medida de prevención o un tratamiento; identificar las necesidades y las tendencias
en la utilización de los servicios de salud; evaluar el impacto de los servicios de salud y otras
actividades en el individuo, el medio ambiente y las condiciones de vida y aportar metodología que
permita obtener información útil para otras ciencias y áreas de la salud.
2. Reseña histórica
Es interesante hacer un recorrido histórico de la Epidemiología, pues a través del mismo podemos ir
visualizando cómo fueron migrando las concepciones teóricas hasta llegar a las más actuales, siempre
intentando explicar el origen, causas y comportamiento de los procesos de salud enfermedad. En este
recorrido identificaremos cuatro grandes momentos de la Epidemiología, algunos de sus referentes
principales y los hechos que caracterizaron cada momento; como así también mencionaremos las
principales epidemias en el transcurso de la historia.
5. 4
El coronavirus, que científicamente se conoce como Orthocoronavirinae, no es nuevo. Sus ancestros
se remontan al siglo IX a.C. y han sido varios los brotes que han ido surgiendo a lo largo de la
historia. En el año 3.300 a.C. existió el Betacoronavirus; en el 3.000 a.C. el Deltacoronavirus; en el
2.800 a.C los investigadores han descubierto que se propagó el Gammacoronavirus; y en el 2.400 a.C.
surgió el Alphacoronavirus.
A continuación, los cuatro momentos y paradigmas históricos de la Epidemiología:
a. Paradigma Del Miasma
Si bien probablemente algunos de los métodos epidemiológicos ya se emplearan en la antigüedad, los
primeros registros que se aproximan a la visión de la Epidemiología, tal como la consideramos
actualmente se remontan al siglo V a.C. con Hipócrates.
Es Hipócrates (c. 460-c. 377 a.C.), considerado como el médico más importante de la antigüedad, que
en su Tratado “de los aires, las aguas y los lugares”, describe que las enfermedades, en vez de tener
un origen divino, pueden deberse a causas ambientales. También fue el primero en utilizar los
términos Epidemia para referirse a las enfermedades que visitan las regiones y Endemia haciendo
referencia a las enfermedades locales. En sus escritos ya se mencionan las enfermedades
respiratorias, como la neumonía, y sus posibles causas asociadas.
La peste negra o muerte negra (Siglo XIV)
A principios del siglo XIV, entre Europa, el norte del África y el cercano Oriente, la población mundial
llegaba a los 100 millones de habitantes. Pero en cuatro años (1348–1352) la cuarta parte de ellos
murió víctima de una enfermedad que se extendió por diversos territorios, matando a la mayoría de los
que tuvieron la mala suerte de padecerla. En un corto periodo, Europa sufrió la pérdida de unos 20
millones de personas debido a la peste. La peste bubónica es una infección producida por
la bacteria Yersinia pestis en la que predomina la inflamación de ganglios infectados en órganos
sexuales y ojos. Cuando predomina la afectación pulmonar, la enfermedad recibe el nombre de peste
neumónica.
6. 5
L
a
p
es
te
n
e
gra fue tan grave que también quedó registrada en el arte de la
época. Foto: Archivo DEF
Cuando ocurrió, nadie disponía de indicios sobre su naturaleza, su causa última o el mecanismo de
difusión. Durante el periodo de la Peste Negra, se atribuía el mal a combinaciones astrológicas
desfavorables o a aires o vapores pútridos (“miasmas”), nada de lo cual podía traducirse en programas
preventivos de ninguna clase.
Hoy se sabe que fue una epidemia de peste bubónica, y se cree que su gran extensión se debió al
auge de las relaciones comerciales internacionales (ruta de la seda), las ratas afectadas viajaban en
los barcos y se extendían así por diferentes países. La peste negra provocó un gran caos en la
población, afectando a todas las personas independientemente de su edad o rango social, generando
grandes cambios en la población tanto a nivel cultural como social. Después de la peste, muchos se
encontraron en la miseria, o por herencias inesperadas, en la opulencia. Muchos de los pobladores
rurales se movilizaron a las ciudades para ocupar el espacio dejado por los muertos. El
comportamiento de los individuos sufrió un cambio radical que transformó sus vidas.
Posteriormente a Hipócrates, y siguiendo la línea de las explicaciones de la peste bubónica, ya
llegando al siglo XVII comienza a tener cuerpo teórico la teoría miasmática formulada por Thomas
Sydenham (1624-1689) y Giovanni María Lancisi (1654-1720). Postulaba que las dolencias eran
causadas por las emanaciones fétidas provenientes de los desechos o de otras sustancias en
descomposición que contaminaban el aire.
En la mitología griega, miasma significaba contaminación. El miasma era una especie de vapor o aire
dañino que enviaban los dioses y que sólo podía ser anulado con la eliminación de lo malo. Mientras
esto no se hiciera, el individuo o la sociedad seguirían sufriendo el castigo divino.
Es entendible que, siendo épocas de grandes epidemias, las mismas se atribuían a castigos divinos
que debían ser reparados por rituales y sacrificios que calmaran el enojo de los dioses.
7. 6
Un cambio importante en las concepciones dominantes ocurre en 1848, cuando preocupados por la
influencia de las condiciones de vida en la salud de la población, Jules Guerin (Alemán) introduce el
concepto de "medicina social que compendiaba los conceptos de fisiología, patología, higiene y terapia
social”
Se proponía la intervención estatal para el saneamiento y organización de los espacios urbanos,
reglamentando la duración de la jornada de trabajo y las condiciones mínimas de higiene que se
debían cumplir. Todas medidas muy revolucionarias para la época, por cierto.
En relación a la historia del coronavirus específicamente, en el siglo XVIII, el coronavirus bovino estaba
ligado al humano y, los investigadores están de acuerdo en que fue entre 1890 y 1899 cuando se
produjo el nacimiento del que afecta a las personas, pero no saben si fue por una separación respecto
al bovino o por una mutación.
En 1854 se produce en la ciudad de Londres un evento que marca un hito en la historia.
John Snow (1813 - 1858), representante de la línea bisagra de pensamiento entre la teoría del
miasma y la teoría del gérmen.
John Snow era un médico inglés al que se consideró un gran precursor de la Epidemiología,
hasta el punto de ser considerado el padre de la Epidemiología moderna.
Ante una gran epidemia de cólera que diezmaba a los habitantes de esa ciudad, él demostró que esta
enfermedad era causada por el consumo de aguas contaminadas con materias fecales, al comprobar
que los casos de esta enfermedad se agrupaban en las zonas donde el agua consumida estaba
contaminada con heces, en la ciudad de Londres en el año de 1854.
Snow, logro mediante la observación, conocer el
comportamiento de la enfermedad en la población,
las características de las personas que enfermaban y
morían, el seguimiento de la “ruta” de la enfermedad
y así establecer el modo de transmisión.
Este trabajo fue considerado “revolucionario” ya que
pudo predecir las características del agente antes
que se desarrollara la microbiología y es considerado
aún hoy como “modelo” de los estudios descriptivos.
Para la misma época en que Snow, en Inglaterra, propone su hipótesis sobre la epidemia de cólera, en
Austria un médico obstetra llamado Ignaz Semmelweis observa que la frecuencia de casos de fiebre
8. 7
puerperal en su sala de internación era superior a la de la sala vecina y se esfuerza por encontrar las
diferencias entre ambas, seguro de que en esas diferencias se encontraba la causa de las fiebres.
Tiempo y esfuerzo le llevó concluir que la causa del aumento de fiebre puerperal se debía a que en su
sala -y no en la otra- ingresaban los estudiantes de medicina provenientes de la morgue y, al realizar
tactos a las internadas, arrastraban restos cadavéricos que causaban la enfermedad (fiebre puerperal).
Semmelweis propuso primero el lavado de manos de los médicos con cloruro cálcico (la misma
sustancia que se usaba para limpiar las cloacas) antes de ingresar a la sala y, posteriormente, entre la
atención de paciente a paciente, logrando reducir la incidencia de fiebre puerperal aún sin conocer la
existencia de los microorganismos.
De este modo abrió el camino a una de las prácticas básicas en la profilaxis de la infección
intrahospitalaria: el lavado de manos, hoy implementado en la población general para reducir el riesgo
de infección por covid-19.
Estas investigaciones y descubrimientos abrieron paso y dan lugar al próximo paradigma de la
epidemiologia donde las enfermedades infecciosas toman mayor protagonismo acompañado por los
avances de la microscopia.
b. Paradigma Del Germen: Era De Las Enfermedades Infecciosas
Otro cambio relevante en la historia de la Epidemiología fue el descubrimiento del bacilo de la
Tuberculosis por Robert Koch (1843 - 1910) quien recibió el Premio Nobel de Fisiología y Medicina en
1905 por sus trabajos.
Koch Roberto
Mediante el descubrimiento de los gérmenes como productores de enfermedades se comienza a
trabajar en las medidas para combatir los mismos. Va tomando cuerpo la teoría bacteriológica que
9. 8
genera el concepto de que para existir una enfermedad debe existir un germen relacionado a la misma.
En el siglo XIX, también Luis Pasteur logró demostrar que algunos procesos de las enfermedades eran
debidos a la actividad de microorganismos vivos. Pasteur convenció al mundo científico que todos los
procesos fermentativos son los resultados de la actividad microbiana, demostrando que cada tipo de
fermentación iba acompañado de un tipo específico de microorganismo. Además, se reconocía que
una persona sana podría ser portadora de microorganismos y contagiar a otras provocado su
enfermedad. Pasteur también ideo el proceso de destrucción de las bacterias, “pasteurización”. Junto a
Robert Koch, probaron que el organismo no solo se encontraba presente de forma constante en la
enfermedad, sino que podía ser aislado y reproducir la enfermedad al inocularlo en otro animal.
De esta manera se plantea la unicausalidad que suplanta al abordaje colectivo de la salud. Lo que por
una parte representa un avance (el descubrimiento de los gérmenes) se convierte también en un
retroceso.
La enfermedad no puede presentarse sin el germen (causa necesaria) y su presencia es todo lo que
se necesita para contraer la enfermedad (causa suficiente).
Se trata de una LÓGICA UNICAUSAL DE AGENTES ESPECÍFICOS
Nájera (1998), afirma que la consolidación de la teoría del germen se debió, además de los trabajos
que
lograron demostrar la especificidad de los agentes contagiosos causales de las enfermedades
infecciosas; a que con la Revolución Industrial las enfermedades contagiosas se convirtieron en el gran
problema de salud para la población. Éstas fueron el resultado de las condiciones deficientes de vida y
de trabajo, de hacinamiento y de falta de saneamiento en los tugurios creados por los trabajadores
pobres en las ciudades industrializadas. Sin embargo, en este momento de la historia sólo se hablaba
de microorganismo infecciosos y de las enfermedades que éstos causaban, configurándose éstas con
el carácter prominente en los círculos políticos y de salud.
En este contexto, según Nájera, se relegaron al olvido los factores sociales que se relacionaban con la
ocurrencia de las enfermedades contagiosas y esto tenía una fuerte intencionalidad política: todo el
mundo estaba tratando de descubrir aquellos agentes biológicos nuevos, los “socialmente neutros”, los
microbios. Para ejemplificar lo anterior, se cita la Primera Conferencia Sanitaria Internacional celebrada
en París en 1851, en la cual se debatió si las enfermedades eran miasmáticas o contagiosas, y en
donde salieron a flote consideraciones políticas relacionadas con la imposición de barreras
comerciales por parte de algunos países europeos. En esta conferencia se concluyó que las
enfermedades eran contagiosas, que los gérmenes estaban presentes en la causalidad de éstas y se
10. 9
desplazó el enfoque de la prevención al cambio de las condiciones socio sanitarias hacia el desarrollo
de las vacunas.
Con el modelo de unicausalidad establecido con las teorías del miasma y posteriormente con la teoría
del germen, la Epidemiología “adoptó un modelo de causalidad que reproducía el de la física, y en el
que un solo efecto es el resultado de una sola causa, siguiendo conexiones lineales”.
Gripe española (1918-1920)
En este contexto, aparece la llamada gripe española, que se dio entre 1918 y 1920 afectando a la
población mundial y se estima que más de 40 millones de personas en todo el mundo perdieron la
vida. Aun no se sabe cuál fue el origen de esta epidemia que no respetaba fronteras ni clases sociales,
aunque diversos factores de tipo económico, demográfico, cultural confluyeron para generar
escenarios sanitarios que propiciaron la rápida instauración y difusión de la enfermedad, a finales de la
Primera Guerra Mundial. Incluso hay quienes opinan que la pandemia fue determinante para la
finalización del conflicto, teniendo en cuenta el impacto que causo en las estructuras militares un
evento infeccioso de tal magnitud.
“Gripe española”. Fuente: El economista.es
A pesar de su nombre, la pandemia tendría su origen en EEUU, en bases militares que luego viajaron
a Europa llevando la gripe a ese continente y generando un gran impacto en la salud de la población.
Esta pandemia, a diferencia de la mayoría de los virus respiratorios, afectó principalmente a la
población económicamente activa (20 a 49 años). Se trataba de un virus de influenza tipo A (H1N1).
La gripe española, sucedió en el marco del paradigma del germen, época en donde la microbiología
era considerada como el principal elemento diagnóstico en las enfermedades clasificadas como de
carácter infecto-contagioso. Los esfuerzos para controlarla a nivel mundial se limitaron a medidas
como el aislamiento, cuarentena, buenos hábitos de higiene personal, uso de desinfectantes y
11. 10
limitaciones de reuniones públicas, que se implementaron de manera desigual.
Entre tanto y con un poco de anterioridad a esta epidemia, en EEUU, en 1735 se descubrió una
enfermedad que no tenía que ver con agentes infecciosos, llamada pelagra, la misma se debe a la falta
de vitamina B, este hallazgo dio fuerza a la aceptación del próximo paradigma.
c. Paradigma de Riesgo y Multicausalidad: Era de las Enfermedades
Crónicas
Este modelo unicausal fue reformulado en 1950 dando resultado a la Teoría
Ecológica y a la Teoría de los factores de riesgo, que plantea la
interacción entre el agente, el huésped y el ambiente (p. ej. físicos: clima;
patológicos: animales y sociales: económico culturales).
De esta manera se plantea la multicausalidad ya que para que una
enfermedad se produzca no solo es necesario el agente causal (microbio), sino también el huésped
predispuesto a enfermar y las variables ambientales que favorecen la transmisión.
Siguiendo con el desarrollo histórico, en 1949 se crea la OMS con el objeto de extender los beneficios
de los desarrollos médicos a todo el mundo.
Hoy día la OMS es la autoridad directiva y coordinadora de la acción sanitaria en el sistema de las
Naciones Unidas.
Es la responsable de desempeñar una función de liderazgo en los asuntos sanitarios mundiales,
configurar la agenda de las investigaciones en salud, establecer normas, articular opciones de política
basadas en la evidencia, prestar apoyo técnico a los países y vigilar las tendencias sanitarias
mundiales
En esta misma década del 50, se descubre el familiar común más cercano al coronavirus actual. Se
trata del OC43 y se encuentra estrechamente relacionado con varias especies de murciélagos. En
humanos fue detectado por primera vez en los años 60, concretamente en las cavidades nasales y
desde entonces han sido identificados seis nuevos miembros de esta familia, siendo el último el actual
coronavirus.
En el siglo XXI, la salud entonces, pasa a ser una responsabilidad compartida.
Los aportes de Richard Doll y Bradford Hill (y sus estudios epidemiológicos sobre la relación entre el
12. 11
tabaco y el cáncer de pulmón) entre 1951 y 1961 incorporando a las técnicas de estudio utilizando
métodos de análisis de caso-control y la aleatoriedad en la selección de los individuos en estudio
generaron grandes avances hacia la Epidemiología moderna. La producción científica en esta etapa
creció considerablemente, al igual que la aplicación de metodologías estadísticas cada vez más
elaboradas.
Otro aporte importante fue el de William Kanell (1974) quien mediante el estudio de Framingham (de
cohorte para enfermedades cardiovasculares), realizando un análisis minucioso y prolongado de
distintos factores de riesgo y sus daños consecuentes.
Todos estos nuevos estudios generaron un nuevo concepto: “ellos mostraban que las enfermedades
no se distribuían de manera homogénea o al azar en las poblaciones, sino que su ocurrencia parecía
estar ligada la condición socioeconómica de los sujetos o de los grupos bajo análisis”
Se incorporaron entonces, conceptos sobre los aspectos culturales y sociales de la salud y la
enfermedad. De este modo, el estudio de las causas de enfermedad fue dejando lugar al estudio
de los determinantes de enfermedad y de salud.
Estos marcos generan los siguientes núcleos problemáticos:
- ¿Qué modelos explicativos subyacen en el interior de los equipos de salud?
- ¿En qué medida los cambios discursivos implican cambios en las prácticas sanitarias
concretas?
-
Estos conceptos se dan en un contexto donde existe una nueva estructura de la morbimortalidad a raíz
de la disminución de las enfermedades infecciosas y el aumento de las crónico-degenerativas.
Se instaura una nueva lógica: Se rechaza la idea de una causa, un efecto y se incorpora la lógica
estadística en donde una exposición es causa de un evento si aumenta la probabilidad de que el
evento ocurra.
Ej.: la causa de cáncer es cualquier factor que aumenta la probabilidad de que un individuo contraiga
cáncer.
13. 12
La teoría multicausal se consolida en la década de los 60 y sustituye la teoría unicausal.
Desde la mitad del siglo XX entonces, el paradigma vigente que más desarrollo ha generado es el del
Riesgo o Epidemiología de las enfermedades crónicas, que se constituye como la llamada
Epidemiología Clásica.
En este sentido las críticas que recibe tienen fundamento en la imposibilidad de incluir algunas
variables de enorme peso en la determinación del daño en salud, como las características sociales o
culturales.
d. Paradigma actual: La Epidemiología Crítica o Social
La Epidemiología ha demostrado ser dinámica, respondiendo con distintos modelos a lo largo de los
últimos doscientos años. Pero está lejos de haber resuelto los debates, de tal modo que, en la
actualidad, si bien existe un modelo dominante, existen otras alternativas para pensarla.
La Epidemiología social latinoamericana, siguiendo a Parra-Cabrera (1999), se concibe como un
proceso social, que asume características distintas en los grupos humanos según su inserción
específica en la sociedad.
Visión que obliga a dar cuenta de la complejidad del hecho epidemiológico y a reconocer la dimensión
social y biopsiquíca. Desde esta perspectiva no se puede dar cuenta del proceso biológico o psíquico
sin considerar su carácter social e histórico. Las desigualdades sociales, los modos de vida y la red
social se constituyen como categorías esenciales. Este planteo remite a la existencia también, de
condiciones de vida (nivel económico, vivienda, trabajo, alimentos, etc.) en el sentido de un conjunto
de condicionamientos que suponen el aumento de la vulnerabilidad y las posibilidades de accionar
sobre la realidad. Esta perspectiva reconoce tres niveles de abordaje al proceso salud-enfermedad: El
micro o individual, que refiere al atributo individual que cada sujeto tenga por su pertenencia a un
grupo social y que lo predisponga a un conjunto de procesos protectores o destructores; el nivel
Fumar
Genes
Exposición ocupacional
Contaminantes ambientales
Cáncer
pulmón
14. 13
familiar, que le brinde al individuo un conjunto de estrategias de resolución de
necesidades y una red de contención o apoyo; y el nivel macro que supone la
existencia de una estructura social que organiza la vida de los diferentes grupos.
Según las nuevas corrientes latinoamericanas, a la Epidemiología también le cabe el rol de identificar
las prioridades del sistema de atención sanitaria, sin dejar de lado la preocupación predominante por la
relación médico-paciente, pero motivando el interés por lo colectivo. En ese sentido, tendría como
objetivo estimular, en los trabajadores de la salud y en la comunidad, la conciencia de las necesidades
sociales en materia de salud.
Los fenómenos estudiados por la Epidemiología pertenecen al ámbito colectivo, y, por lo tanto, deben
remitir a lo social. Entonces...
¿Tiene sentido pensar en algún proceso biológico que sea independiente del contexto social?
¿Es posible pensar al individuo aislado, desenraizado de la sociedad en que vive?
La Epidemiología social se distingue por la insistencia en estudiar explícitamente los determinantes
sociales del proceso salud-enfermedad.
Los factores sociales, económicos, culturales, demográficos, son pensados como partes de un
conjunto más amplio de causas que incluye factores del ambiente físico y biológico en un componente
designado como ambiente. El compromiso histórico de la Epidemiología con la mejora de salud de las
poblaciones y con la reducción de las desigualdades sociales desafía a todos los epidemiólogos a
seguir en el desarrollo de nuevas teorías, nuevas estrategias de investigación y nuevas herramientas
de análisis que puedan ofrecer elementos correctos para orientar las intervenciones sociales en el
campo de la salud, reconociendo los derechos de la ciudadanía, en la garantía de libertades
democráticas y en la búsqueda de la felicidad humana.
La Epidemiología comunitaria tiene sus raíces en las situaciones de vida marginales,
desfavorecidas, periféricas con respecto a los distintos estratos sociales, económicos y los recursos
sanitarios. Esto no significa que la Epidemiología Comunitaria se interesa exclusivamente en lo que
sucede en las periferias y en las realidades más cercanas o locales. Comunidad y comunitario definen,
sobre todo, un estilo de trabajo y un objetivo: hacer epidemiologia, no sobre o alrededor de grupos
humanos (o poblaciones), sino con estos mismos grupos. Comunidad y comunitario se refiere en este
sentido a realidades pequeñas, donde se practica más la participación. Pero estas realidades
pequeñas pueden ser eslabones de las tantas redes de las tantas comunidades que constituyen la
15. 14
complejidad de la sociedad y de sus múltiples periferias. La Epidemiologia Comunitaria es un área de
experimentación de la capacidad y posibilidad que las poblaciones dejen de ser objetos de
conocimientos y sí sujetos de derechos, de conocimiento y de vida. Por todo ello, la Epidemiología
Comunitaria tiene como prioridad aplicar las técnicas de la Epidemiología en condiciones locales que
permitan una micro planificación, una micro evaluación. En cambio, la Epidemiología clásica mira y
mide lo que pasa en las comunidades como si las comunidades fueran un objeto de observación. La
Epidemiología Comunitaria considera que la salud debe ser un constante desarrollo de la mirada
autónoma de las comunidades sobre sus propios problemas de salud y la participación activa para
resolverlos y aliviarlos.
La dimensión cultural es una de las partes determinantes del proceso salud- enfermedad- atención-
cuidado. Un enfoque epidemiológico que abarque los aspectos socioculturales, es importante en el
contexto de las políticas de salud actuales, ya que sería difícil sostener una atención con equidad,
calidad y eficiencia sin tener como referencia el punto de vista del otro; es decir, definir las
necesidades y condiciones de salud - enfermedad de las comunidades desde una cultura ajena al
equipo de salud. Desde este enfoque, reconocer las limitaciones actuales de la Epidemiología en el
ámbito cultural desarrollando una Epidemiología Sociocultural permite un acercamiento real y tangible
a la población, y una base más adecuada para el impulso de acciones de salud con participación
social. Por ejemplo, esta limitante se acrecienta cuando nos referimos a comunidades rurales e
indígenas, en cuyo contexto cultural opera un conjunto de problemas de salud/enfermedad que, aun
cuando son percibidos por la población, no encuentran lugar en la medicina oficial, por tanto, en
ocasiones no suelen ser reconocidos por el equipo de salud y las instituciones sanitarias, siendo el
resultado la negación del problema. Entre las demandas de curación con sanadores en algunas
comunidades, se reconocen como problemas de salud frecuentes el mal de ojo, aires, envidias,
espanto, latido, brujería, mientras que para los profesionales de la salud las principales causas de
consulta reconocidas son padecimientos infectocontagiosos, respiratorios y digestivos. Como resultado
se presentan situaciones de riesgo y enfermedad no identificadas en términos epidemiológicos como
necesidades de prevención y atención. Estos síndromes culturalmente delimitados y otros
padecimientos de índole sociocultural, son problemas reales en la cotidianeidad de la población, que
generan sufrimiento, incapacidad y muerte.
Mapa de las enfermedades infecciosas desatendidas (EID) en América Latina.
16. 15
Una de las referentes más importantes de la llamada Epidemiología Crítica es Asa Cristina Laurell,
quien, como Coordinadora de la Maestría en Medicina Social en la Universidad Autónoma
Metropolitana de México, escribía en 1982 que “No es en el estudio de los enfermos de tuberculosis
que vamos a aprehender mejor el carácter social de la enfermedad, sino en los perfiles patológicos que
presentan los grupos sociales”. Las sociedades con distintos grados de desarrollo y de organización
social, exhiben patologías colectivas diferentes. Y dentro de una misma sociedad, las clases que la
componen mostrarán condiciones de salud distintas.
Entonces, para demostrar el carácter social de la enfermedad, es necesario estudiar el tipo, la
frecuencia y la distribución de esta entre los distintos grupos sociales, que componen la sociedad. Es
decir, al existir una articulación entre el proceso social y el proceso de salud y enfermedad, éste debe
asumir características distintas según el modo diferencial que cada uno de los grupos se inserta en la
producción y se relaciona con el resto de los grupos sociales. Existe documentación empírica, que
comprueba que la distribución de la enfermedad y de la muerte es desigual, y que es posible detectar
perfiles patológicos específicos de los grupos sociales si se construyen con criterios objetivos. Uno de
los pocos estudios latinoamericanos que comprueba la probabilidad diferencial de morir en la temprana
infancia según la clase social, fue realizado por Behm en Costa Rica. Esta investigación demuestra
que el riesgo de morir durante los dos primeros años está directamente relacionado con la ocupación
del padre, o sea, con el modo como éste se inserta en la producción. Así la probabilidad de que un
17. 16
niño proletario urbano muera antes de los dos años de edad es cuatro veces mayor de que el hijo de la
alta o mediana burguesía lo haga; el riesgo del niño campesino es cinco veces mayor.
Por todo esto, es que existe la necesidad de avanzar de una posición crítica a la explicación biologista
de la enfermedad, hay que avanzar hacia la construcción de una interpretación distinta del proceso
salud enfermedad que teniendo como eje su carácter
social pueda impulsar la generación de un nuevo
conocimiento respecto a éste. La importancia de eso no
sólo reside en que puede añadir algunos elementos
novedosos, sino porque ofrece la posibilidad de abordar
toda la problemática de salud desde un ángulo distinto,
ya que la aborda como fenómeno colectivo y como hecho
social. Este enfoque tiene implicaciones profundas para
la práctica, ya que la medicina hospitalaria poco tiene que
ver con el proceso salud enfermedad en la sociedad. Una
nueva práctica, sin embargo, no depende sólo de una interpretación del proceso salud enfermedad
sino de que descansa sobre bases sociales que la puedan impulsar y sostener.
Otro referente importante de la Epidemiología Crítica es el brasileño Naomar Almeida Filho, quien
explica que la Epidemiología Crítica es un término utilizado para expresar una propuesta
latinoamericana, frente a la llamada Epidemiología Convencional, que se concibe como uno de los ejes
disciplinares del movimiento de la Medicina Social, en conjunto con la planificación y las ciencias
sociales en salud.
Para conocer más sobre su pensamiento, podes leer la siguiente nota periodística en
https://www.pagina12.com.ar/diario/universidad/10-274247-2015-06-05.html
Desde sus escritos se pueden puntuar algunas diferencias entre la Epidemiología Convencional o
clásica y la Crítica:
a. La Epidemiología Crítica está inmersa en el paradigma histórico-social y la Epidemiología
Convencional en el positivista.
b. La Epidemiología Critica tiene como objeto de estudio el proceso salud enfermedad en los
colectivos, la Epidemiología Convencional tiene como objeto la ocurrencia, distribución y factores
asociados a las enfermedades en las poblaciones. Aquí se da una diferencia entre lo “poblacional” lo
18. 17
“colectivo”. Lo “poblacional” se entiende como un conjunto unidimensional o una sumatoria de
individuos. El “colectivo” implica un grupo humano que es social e histórico.
c. La Epidemiología Crítica pretende ser una “Epidemiología de la desigualdad”, pone de manifiesto
que el principal determinante para enfermar y morir lo constituyen las condiciones socioeconómicas de
los grupos poblacionales. Para la Epidemiología Convencional los socio-económico aparentemente es
solo un factor de riesgo más como lo biológico, el ambiente o los servicios de salud.
d. El principal instrumento de trabajo de la Epidemiología Crítica es el análisis de los procesos de
reproducción social en los diferentes determinantes del proceso salud-enfermedad. Para la
Epidemiología Convencional la principal herramienta son los factores de riesgo y la causalidad. La
Epidemiología Convencional es cuantitativa y la Critica triangula lo cuali y cuantitativo. La
Epidemiología Convencional privilegia los abordajes analíticos experimentales sobre los descriptivos,
para la Epidemiología Crítica esta jerarquía es innecesaria en el sentido que los estudios descriptivos
están más ubicados en su contexto histórico- social, y los analíticos y experimentales son más
“artificiales”.
e. La Epidemiología Convencional es de naturaleza inductiva lo cual se refiere a que a medida que se
van acumulando datos que confirman una teoría, o aumenta la posibilidad de que esta sea verdadera.
La Epidemiología Critica es más deductiva en el sentido que plantea determinantes estructurales de
tipo socioeconómico como favorecedores del proceso de enfermar y morir, y que en general son
aplicables para todos los colectivos.
f. La Epidemiología Crítica reconoce más la politicidad de su accionar en el sentido que puede
favorecer transformaciones en los procesos que producen enfermedad. El epidemiólogo debería
asumir un papel militante en cuanto a que se le considera un sujeto político que puede producir
movilización social para afectar los determinantes estructurales o socioeconómicos. Para la
Epidemiología Convencional su accionar es más limitado como disciplina de la Salud Pública y
reconoce que es a esta última a quien le corresponden las intervenciones
La llamada “crisis de la Epidemiología”, que da pie al nacimiento de la Epidemiología social, colectiva y
crítica, se sitúa concretamente en Latinoamérica en el contexto del surgimiento de la Salud Colectiva
como “movimiento de resistencia” y alternativo frente a una salud pública hegemónica caracterizada
por una visión preventivista de acción comunitaria limitada a factores de riesgo.
La crisis se da cuando el enfoque de Epidemiología Convencional no responde a los requerimientos de
la Salud Colectiva y por el reconocimiento que tanto la teoría como práctica de la Epidemiología
requieren de otro paradigma alternativo en el cual el objeto del estudio se materialice no en la
enfermedad del individuo sino de las colectividades entendidas más que como la simple sumatoria de
19. 18
individuos.
Por último, citaremos a Jaime Brehil (Ecuatoriano), también como referente importante de la
Epidemiología crítica, quien en 2013 proponía que la determinación social de la salud es una de las
tres categorías centrales de la propuesta para una Epidemiología crítica. Por eso la Epidemiología es
un terreno de lucha de ideas, de disputa sobre cómo enunciar la salud y cómo actuar, y esa disputa
obedece a intereses sociales encontrados.
Saber que cuando se hace Epidemiología hay una politicidad implícita y un nexo evidente o tácito con
intereses estratégicos de un sector social, no solo es un acto de transparencia ética, sino un signo de
rigurosidad metodológica. Cuestión básica, sobre todo cuando el objeto de estudio, constituye un
elemento sensible de la evaluación de un proyecto social o de gobierno, por ser un recurso
“diagnóstico” con el que se define la imagen sanitaria de la sociedad, con el que valoramos el éxito o
fracaso de las políticas y, sobretodo, con el que construimos evidencias de los impactos generados por
la producción y el vivir social.
La Epidemiología crítica latinoamericana si bien se fraguó en escenarios académicos, tuvo siempre
como fuelle y motivo de inspiración la lucha de nuestros pueblos por superar un régimen social
centrado en la acumulación de riqueza, y no las preocupaciones burocráticas de la llamada
gobernanza.
El carácter crítico de la propuesta se fundamenta en la vinculación con las luchas de los pueblos por
superar un régimen social centrado en la acumulación de la riqueza y el reconocimiento de la
incompatibilidad del sistema social imperante y el modo de civilización que lo reproduce, frente a la
construcción de modos de vivir saludables.
A la Epidemiología convencional, a pesar de su
robusto arsenal formal estadístico, no le es posible
explicar la relación entre el sistema social, los modos
de vivir y la salud; ni entender la distribución por
clases de las formas e intensidades de exposición
humana a procesos peligrosos; ni la vulnerabilidad
diferencial de los colectivos situados en inserciones
sociales distintas; ni comprender en profundidad el
metabolismo sociedad-naturaleza y su impacto social. Y finalmente, con este modelo, resulta imposible
“conocer la sociedad para transformarla” hacia una salud profunda, que fuese el pilar no sólo de una
20. 19
nueva salud pública, sino de la construcción de un nuevo modelo civilizatorio saludable.
El paradigma de la Epidemiología crítica trabaja, en la construcción popular-académica de una
sociedad centrada en la vida, la equidad y la plena bioseguridad (socio-biocéntrica), mediante una
investigación intercultural, interdisciplinaria y basada en la comunidad, que busca alimentar un proceso
de reforma crítica, cuyo eje estratégico es el apoyo desde la ciencia epidemiológica a la defensa de los
derechos. Una investigación y monitoreo enfocados en los procesos críticos de la salud, y proyectados
hacia el horizonte de una nueva civilización que pueda ser saludable y biosegura, produciendo
conocimientos críticos, instrumentos técnicos y herramientas para la rendición de cuentas y control
social sobre los grandes dominios de la determinación social general que se expresan en las 4 “S” de
la vida (civilización sustentable, soberana, solidaria, saludable/biosegura).
Para la Epidemiología crítica el tema no es la inequidad aislada, sino el cambio integral del sistema
social de acumulación/mercado que impide la construcción de las 4 “S” de la vida y la
transformación del modelo civilizatorio en los cincos espacios claves donde la reproducción social
media la construcción de la salud.
Situándonos en el siglo actual y con la Epidemiología crítica como principal movimiento de vanguardia
a la hora de explicar el comportamiento de las enfermedades; como antecedente de la actual epidemia
de coronavirus podemos mencionar el síndrome respiratorio agudo grave (SRAS) (en inglés: Severe
Acute Respiratory Syndrome, SARS), como enfermedad respiratoria viral causada por un coronavirus,
llamado coronavirus asociado al SARS (SARS-CoV). La primera vez que se informó fue en Asia en
febrero de 2003. A los pocos meses, la enfermedad se propagó en más de dos docenas de país en
Norteamérica, Suramérica, Europa y Asia antes de que se pudiera contener el brote global de 2003.
El brote de SARS de 2003: Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), un total de 8.098
21. 20
personas en todo el mundo se enfermaron del SARS
durante dicho brote. De esta cifra, 774 personas murieron.
En los Estados Unidos, solo ochos personas resultaron
infectadas, y todas habían viajado a otras partes del
mundo. La epidemia no afecto a Sudamérica. A mediados
de 2003, la Organización Mundial de la Salud informó que
se había suprimido a Taiwán (China) de la lista de zonas
con transmisión local reciente del síndrome respiratorio
agudo severo (SARS). Taiwán fue así el último territorio
suprimido de la lista, ya que habían transcurrido 20 días
(dos periodos consecutivos de incubación de 10 días) desde que se registró el último caso, el 15 de
junio. Sobre la base de los informes de vigilancia de los países, pudo considerarse que se habían roto
en todo el mundo las cadenas humanas de transmisión del virus SARS.
De la provincia de Guangdong (China), el virus de SARS viajó con el ser humano a 30 países y zonas
del mundo, pero anidó profundamente sólo en seis. En todas éstas la pauta de transmisión fue la
misma: un caso de SARS importado y hospitalizado infectó al personal de salud y a otros pacientes;
éstos, a su vez, infectaron a las personas con quienes habían estado en contacto estrecho, y la
enfermedad acabó propagándose a la comunidad. En las zonas afectadas, aproximadamente el 20%
de todos los casos se registró entre el personal de atención de salud.
La Directora de la OMS en ese año, dijo que: “El SRAS seguirá amenazando al sistema mundial de
salud pública. Es posible que aparezcan nuevos casos. Puede que se trate de una enfermedad
estacional y que vuelva a aparecer más entrado el año, posibilidad que se basa en lo que conocemos
de otros miembros de la familia de los coronavirus. Por otra parte, es posible que la fuente original del
brote siga en el medio ambiente y provoque otro brote en los próximos tiempos. Por ejemplo, puede
que el virus aún circule en un reservorio animal y salte de nuevo al ser humano si se dan las
condiciones adecuadas. Por lo tanto, hay que investigar en profundidad la posible existencia de un
reservorio animal. Sólo si se identifica la fuente original del brote y se comprende el modo en que el
virus salta de la fuente original al ser humano se podrán impedir los brotes futuros.
Gripe H1N1 (2009): Fue la primera pandemia del siglo XXI, y nos dejó un ejemplo más de cómo un
virus puede propagarse a cualquier punto del planeta. A fines de marzo del 2009, México experimento
un aumento dramático de pacientes con enfermedad similar a la influenza en varias áreas del país. El
22. 21
23 de abril se confirma que el virus causante es de origen porcino y es influenza A (H1N1). Desde
entonces comienzan a multiplicarse los casos y comienzan a aparecer en Estados Unidos y en otros
países en el resto del mundo hasta que en Junio OMS declara la pandemia, ya que se encontraba la
infección muy difundida desde Norte América hasta Australia, Reino Unido, Argentina, Chile, España y
Japón. En septiembre la OMS reportó que la influenza A (H1N1) se había confirmado en más de
200.000 personas, en más de 100 países y se habían confirmado al menos 2185 muertes. Existen
posiciones opuestas para explicar esta pandemia, por un lado, la Epidemiología multicausal, con un
fuerte énfasis en la relación agente-huésped, y posturas críticas como la de la corriente
latinoamericana de medicina social, que centran el análisis en el carácter social de las enfermedades.
MERS-CoV (2012): MERS es el acrónimo de Coronavirus del Síndrome Respiratorio de Oriente Medio,
el virus que causa el MERS. El virus se informó por primera vez en 2012 en Arabia Saudita, y solo
produjo brotes, no llegando a darse una pandemia. Es diferente de cualquier otro coronavirus que los
investigadores hayan encontrado antes en personas. MERS-CoV probablemente provino de una
fuente animal en la Península Arábiga. Los investigadores han encontrado el virus en camellos de
varios países. Los estudios han demostrado que el contacto directo con los camellos es un factor de
riesgo de infección humana. MERS-CoV no es el mismo coronavirus que causó el síndrome
respiratorio agudo severo (SARS) en 2003. Sin embargo, al igual que el virus del SARS, MERS-CoV
es más similar a los coronavirus que se encuentran en los murciélagos.
Entre sus características más importantes, no parece que el virus se transmita fácilmente de una
persona a otra a menos que haya un contacto estrecho, por ejemplo, al atender a un paciente sin la
debida protección. Ha habido brotes asociados a la atención sanitaria en varios países. Los más
importantes se han producido en Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos y la República de Corea.
Aproximadamente un 35% de los pacientes con MERS han fallecido, pero esta cifra puede
sobreestimar la verdadera tasa de letalidad porque es posible que los casos leves no hayan sido todos
detectados por los sistemas de vigilanciai
. No se conocen bien los orígenes del virus pero, según se
desprende del análisis de varios de sus genomas, se cree que el virus habría podido originarse en
murciélagos y haberse transmitido a los camellos en algún momento de un pasado lejano. Este virus
no produjo una pandemia, pero ha habido conglomerados de casos en establecimientos de atención
sanitaria donde parece que se hayan dado casos de transmisión de persona a persona, sobre todo
cuando las prácticas de prevención y control de la infección fueron inadecuadas o inapropiadas. Hasta
ahora la transmisión de persona a persona ha sido limitada, y ha ocurrido entre familiares, pacientes y
profesionales sanitarios. Aunque la mayoría de los casos de MERS se han producido en el entorno
23. 22
sanitario, por el momento no se ha documentado una transmisión sostenida de persona a persona en
ninguna parte del mundo.
3. En síntesis:
Finalmente podemos destacar que hemos abordado cómo cada momento o paradigma de la
epidemiología intentó, explicar el origen de las enfermedades o epidemias desde una mirada original,
las cuales se dieron a medida que el ser humano empezó a organizarse en sociedad y a crear núcleos
de personas que convivían juntos en un mismo espacio territorial.
Con el crecimiento poblacional, también las enfermedades se extendían a lo largo del planeta,
generando una amenaza para la población. Estas pandemias en ocasiones transformaron las
sociedades en las que aparecieron y, muy posiblemente, han cambiado o influido decisivamente en el
curso de la historia, tal como pasa en la actualidad con el covid-19.
4. Bibliografía utilizada para la elaboración de la clase
1. Doval, HC. La emergencia del paradigma epidemiológico de salud – enfermedad en la
población. Carta del Director de la Revista Argentina de Cardiología. Rev Argent Cardiol
2016;84:515-523. http://dx.doi.org/10.7775/rac.es.v84.i5.9658
2. Breilh, J. La determinación social de la salud como herramienta de transformación hacia una
nueva salud pública (salud colectiva) Rev. Fac. Nac. Salud Pública 2013;31 (supl 1): s13-s27
3. Desarrollo histórico de la epidemiología: su formación como disciplina científica Sergio López-
Moreno, M.C., Francisco Garrido-Latorre, M. en C., Mauricio Hernández-Avila, Ph. D., salud
pública de méxico / vol.42, no.2, marzo-abril de 2000.
4. Notas históricas sobre el desarrollo de la epidemiología y sus definiciones Sergio López
Moreno, Alexander Corcho Berdugo, Alejandra Moreno Altamirano, Rev Mex Pediatr 1999;
66(3); 110-114
5. Epidemiología: El cambio de paradigmas MSc. Dr. Justo F. Rodríguez López, MSc. Dra.
Barbarita Rodríguez González, Medicent Electrón. 2014 jul.-sep. ;18(3)