El documento promociona la compra de un nuevo Ferrari FF de 3 millones de euros, afirmando que es una ganga porque puede alcanzar los 580 km/h, se conduce solo sin volante y tiene instalaciones como una piscina, gimnasio y spa en su interior. Además de por ser una Ferrari, si se compra el coche se regalan varios objetos como pipas, un hamster, un mando de PlayStation 1 y otros artículos.