La fabricación justo a tiempo significa producir el mínimo número de unidades en las menores cantidades posibles y en el último momento posible para eliminar la necesidad de inventarios, con el objetivo de "producir los elementos que se necesitan, en las cantidades que se necesitan, en el momento en que se necesitan". Ejecutada correctamente, la filosofía justo a tiempo reduce o elimina el desperdicio en las actividades de compras, fabricación, distribución y apoyo a la fabricación en una empresa de manufactura mediante el uso de tres componentes básicos: flujo, calidad