La organización administrativa se rige por principios establecidos en la constitución y leyes. La ley orgánica de la administración pública establece los principios y objetivos de la organización y funcionamiento de la administración, incluyendo el servicio a los ciudadanos y la rendición de cuentas. La ley también regula principios como legalidad, descentralización, coordinación, y responsabilidad para garantizar la efectividad de la administración pública.