Durante la Baja Edad Media en Europa feudal entre los siglos XIII y XV, hubo una expansión del cristianismo a través de las Cruzadas que llevaron a la formación de nuevos reinos y órdenes religioso-militares. Las ciudades crecieron con lonjas, gremios, ferias y universidades, mientras que el comercio y el intercambio cultural aumentaron. El siglo XIII trajo un crecimiento agrícola con mejoras tecnológicas, excedentes y un aumento de la población. Sin embargo, el