El documento analiza cómo la posmodernidad ha creado una crisis de valores religiosos debido a factores como el sentido de vida inmanente, la indiferencia agnóstica, la revolución científica y la materialización del universo. Estos elementos han llevado al hombre a darse cuenta de sus capacidades para manipular la naturaleza y han configurado la sociedad contemporánea de una manera diferente a las épocas anteriores.