La rebeldía adolescente: causas y consejos para padres
1. Nombre: Anita Guaña
Año lectivo: 2012-2013
Tema: La Rebeldía en la
Adolescencia
2. ¿Conoces a alguien que este en la adolescencia?
Seguro que si. Muchos padres de familia dicen por
ahí que en la medida que los hijos crecen los
problemas también aumentan. La verdad, no están
tan equivocados, pues los hijos cuando son
pequeños son mucho más “manejables”. Es decir,
es más fácil controlar lo que hacen, con quién están
y dónde se encuentran. Sin embargo, en la medida
en que se convierten en adolescentes, se tornan
inconformes y asumen actitudes rebeldes
(murmurando, gritando, reclamando, lanzando o
golpeando objetos o agrediendo personas).
3.
4. La rebeldía es una característica propia de los
adolescentes que se pone de manifiesto en sus
actitudes de diferentes maneras; protestando
constantemente, oponiéndose a las normas o a
lo establecido, desobedeciendo por sistema y
enfrentándose con frecuencia a los padres,
tutores y profesores.
5. El comportamiento rebelde de los adolescentes
es la consecuencia de la búsqueda de
independencia. Necesitan distanciarse de la
relación de dependencia y protección que han
tenido con sus padres para adentrarse en el
mundo adulto y encontrar su identidad
personal.
6. Con respecto a su carácter se encuentra bastante
desorientado por los cambios que está sufriendo.
Además de los fisiológicos, también se producen
cambios en su forma de pensar y de sentir,
experimenta sensaciones nuevas y formas de ver
las cosas diferentes.
Se revela ante todo lo que considera injusto.
Rechaza reglas y normas que él no considera
lógicas o le parecen absurdas, ya sean sociales o
familiares, y se niega a cumplirlas.
7. La adolescencia es una etapa en la que las
relaciones con los hijos se hacen más
complejas. Veamos a continuación una serie de
sugerencias que pueden ayudarnos en este
periodo tan difícil a tener una mejor relación
con nuestros hijos y evitar, en la medida de lo
posible, ese comportamiento rebelde:
8. Ser críticos sólo en lo esencial. No podemos
juzgar ni criticar aquellos aspectos de los hijo que
no sean realmente importantes.
Intentar mantener una buena comunicación.
Debemos procurar tener conversaciones y
momentos divertidos con nuestros hijos, buscar
ocasiones para hacer actividades con ellos y
disfrutar del tiempo que pasamos juntos.
9. Darles responsabilidades. Los padres tienen
que dejar de estar siempre encima de su hijo,
tienen que asumir que ha crecido y empezar a
tratarle de diferente manera a como lo hacía en
la infancia
Escuchar con atención. Siempre debemos
escucharles con atención, esperando a que
finalice para intervenir y no ridiculizar ni
menospreciar lo que dice.