La reforestación implica volver a plantar árboles donde alguna vez existieron o nunca habían existido, y tiene varias ventajas como mejorar la calidad del aire, reducir la temperatura, proveer alimento y áreas recreativas, y reducir la sedimentación. La deforestación ocurre cuando se eliminan árboles de manera natural o debido al desarrollo urbano, crecimiento poblacional u otros factores, por lo que es importante reforestar para recuperar las áreas deforestadas.