La persona afectada por Alzheimer pasó por varias etapas descritas en el documental. Primero empezó tomando notas para recordar cosas como citas médicas, lo que llevó a una obsesión con visitas repetidas al dentista. Luego se obsesionó con arreglos a su audífono y comió galletas guardadas. También tuvo etapas relacionadas con un podólogo, entradas a espectáculos, su pensión y comer plátanos. Finalmente empacó maletas sin un claro destino.