El documento describe la vida de las mujeres en los campos de concentración nazis. Más de 100,000 mujeres pasaron por el campo de Ravensbrueck, el mayor campo de concentración para mujeres. Las mujeres sufrieron maltrato, experimentos médicos inmorales, acoso sexual y violación. Los nazis también establecieron burdeles en campos como Auschwitz donde forzaron a mujeres prisioneras a trabajar como prostitutas como una forma de "recompensar" a los prisioneros masculinos, a pesar de que estas promesas nunca se cumplieron.