El 22 de junio de 2002, en Melbourne, Australia, el día más corto del hemisferio sur proporcionó solo 9 horas y 32 minutos de luz diurna, mientras que el día más largo del hemisferio norte proporcionó más de 14 horas de luz. El presidente de la Sociedad Astronómica explicó que la existencia de las estaciones se debe a los 23 grados de inclinación del eje de rotación de la Tierra.