La Ley de los Tercios se utiliza para componer fotografías dividiendo la imagen en tercios imaginarios y colocando el elemento más importante cerca del punto de intersección de las líneas para dirigir la atención visual del espectador. Siguiendo esta ley, el motivo principal se coloca cerca de una esquina mientras los elementos secundarios ocupan la parte central, creando una composición asimétrica pero equilibrada. Siempre que sea posible, se recomienda aplicar las tres leyes de la composición fotográfica conocidas como La