No improvise si no sabe qué hacer, no entre en pánico, conserve la tranquilidad para actuar con rapidez, no arriesgue su vida y evalúe la seguridad del lugar. Siempre atienda primero a la persona afectada sin dispersarse, buscando primero las lesiones que puedan comprometer la vida, y no la mueva innecesariamente ni le administre medicamentos.