SELECCIÓN DE LA MUESTRA Y MUESTREO EN INVESTIGACIÓN CUALITATIVA.pdf
LOS DERECHOS HUMANOS- ESCUELA NORMAL EXPERIMENTAL DE ACAPONETA
1. LOS DERECHOS
HUMANOS COMO MARCO
REGULADOR DE LA
CONVIEQUIPO:
RANGEL BARRON
YANELY GLISETH.
BETANCOURT FLORES
DANIELA ESTEFANIA.
LOPEZ ALVARADO
VIOLETA.
VENCIA
2. En las sociedades contemporáneas democráticas, la base de una
convivencia es el respeto a los derechos humanos (DH). Sin embargo,
esto no siempre ha sido así, ya que a lo largo de la historia el avance,
aceptación e integración a los marcos jurídicos (nacionales e
internacionales) de los derechos humanos como paradigma de
convivencia ha pasado por complejas etapas y largas luchas sociales.
3. Como todo ejercicio democrático, la práctica efectiva de los derechos
humanos requiere que éstos se integren paulatina, pero sólidamente a la
cultura democrática de cada ciudadano; que se incorporen a las formas
de pensar, de vivir y de relacionarnos con los demás, de modo que
aprendamos a convivir, a autorregularnos, a dialogar para resolver
nuestros conflictos con justicia, respeto y dignidad.
4. La creación de una cultura de la legalidad, la resolución pacífica de conflictos y
el apego a la justicia constituyen el sustento primordial para una convivencia
digna en un entorno de respeto a los derechos humanos.
En un país como el nuestro, la tarea se complica dada la heterogeneidad de la
población, las diferencias socioeconómicas y regionales, así como las distintas
formas de pensar que caracterizan a la población, sin embargo el apego a los
DH constituye un requisito sin el cual la consolidación de una nación
democrática es prácticamente impensable.
Uno de los desafíos de los derechos humanos es el de encontrar caminos para
defender su universalidad en beneficio de todos los seres humanos, con
respeto, al mismo tiempo, de su diversidad.
5. Toda convivencia se rige, explícita o
implícitamente, por un marco regulador de normas
y valores, tanto en el ámbito más micro de la
familia o entorno inmediato al individuo, como en
el conjunto de los diferentes contextos sociales en
los que vivimos.
6. Sabemos que ese código de normas y valores es transmitido desde
diferentes instancias sociales, familia, escuela, medios de
comunicación, sistema judicial, estrategias políticas, confesiones
religiosas, etc. Pues bien, para todos esos ámbitos y como criterio
general de convivencia proponemos partir del conjunto de los
derechos y deberes integrados en la Declaración Universal de los
Derechos Humanos.
¿Por qué? Porque los derechos humanos representan el pacto más sólido
para una convivencia democrática, además de representar el consenso
más grande jamás conseguido en la historia de la humanidad sobre
valores, derechos y deberes para vivir en comunidad.
7. Al indagar en los pilares sobre los que buscamos construir la convivencia,
los derechos humanos representan la opción idónea y legítima. La idea
central en la que se asienta el concepto de derechos humanos es la de la
dignidad inherente a todo ser humano y sobre este punto de partida
debemos construir la convivencia en todos los ámbitos sociales.
Dignidad que se sitúa entre tres cualidades esenciales: libertad, justicia y
plena igualdad. En consecuencia, estamos hablando no de una dignidad
de carácter exclusivamente moral, sino de convivencia digna. En esta
dirección podemos decir que la Declaración promueve un conjunto de
valores, principios y normas de convivencia que deben conformar esa
dignidad humana, así como la vida en sociedad, al mismo tiempo que
rechaza los valores y prácticas contrarias …