1. LOS FRUTOS QUE CONDUCEN A LA VICTORIA Olvidar a Dios es nadar contra la corriente y las tempestades de problemas que seguramente vendrán en la vida de todos los creyentes, por esta razón hay que estar preparado para todos los ataques que vendrán como: El pecado, la carne, el mundo y el diablo. Jesús advierte que los cuidados de este mundo, el engaño de las riquezas, la esclavización por las cosas materiales y el placer del pecado pueden ahogar la Palabra de Dios y hacer que ellos se olviden de Dios.