Los arquitectos griegos de la época arcaica y clásica utilizaron principalmente madera, ladrillos, piedra caliza, mármol y bronce en la construcción de edificios. Usaron madera para soportes y techos, ladrillos para paredes, piedra caliza y mármol para columnas, muros y porciones elevadas, y bronce para detalles decorativos. También emplearon terracota para ornamentos y adobe para construcciones más humildes.