2. En el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
Dios mío, ven en mi auxilio.
Señor, date prisa en socorrerme.
Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora
y siempre, por los siglos de los
siglos. Amén.
3. CREDO DE LOS APÓSTOLES
Creo en Dios Padre, Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.
Y en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor,
que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo,
nació de Santa María Virgen,
padeció bajo el poder de Poncio Pilato,
fue crucificado, muerto y sepultado,
descendió a los infiernos,
al tercer día resucitó entre los muertos,
subió a los cielos y está sentado a la derecha
de Dios Padre, Todopoderoso.
Desde allí vendrá a juzgar a vivos y muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica,
la comunión de los santos, el perdón de los pecados,
la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.
Te ofrecemos, Santísima Trinidad, este Credo para honrar todos los misterios de nuestra Fe:
CREDO DE LOS APÓSTOLES
4. PADRE NUESTRO
Te ofrecemos, Santísima Trinidad, la oración que nuestro
Señor Jesucristo nos enseñó:
Padre Nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad,
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Amén.
5. AVE MARÍA
Honremos a María, Hija bien Amada del Padre Eterno:
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
6. AVE MARÍA
Honremos a María, Madre admirable de Dios Hijo:
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
7. AVE MARÍA
Honremos a María, esposa fidelísima del Espíritu Santo:
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
8. Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio,
ahora y siempre,
por los siglos de los siglos.
Amén.
GLORIA
9. Oramos en este Santo Rosario por las intenciones de todos los que se han unido el
día de hoy a nuestra oración; por los integrantes de la CFC, por nuestros hijos,
especialmente por ……………………,que Dios y la Virgen María los conduzcan por el
camino de la santidad.
Roguemos al Señor
Por nuestra iglesia Católica, el Papa Francisco, Cardenales, Obispos, sacerdotes,
religiosas; para que sean fieles al amor de Cristo e instrumentos del Espíritu
Santo.
Roguemos al Señor
Por los niños por nacer, por todas las mujeres gestantes, los ancianos y toda persona
enferma, abandonada o maltratada que Dios derrame su infinita misericordia
sobre ellos.
Roguemos al Señor
Por las familias que sufren, para que encuentren en la fe la fortaleza necesaria para
superar cualquier obstáculo y Dios Padre sea el lazo que los una para siempre .
Roguemos al Señor
Pedir la gracia divina que nos inspire a trabajar en aras del bien común. Que el
Espíritu Santo guíe a nuestros líderes políticos, civiles y religiosos, para tomar
decisiones que promuevan la justicia, la equidad y la prosperidad para todos.
Roguemos al Señor
El Señor acoja con bondad y amor nuestras peticiones ROGUEMOS AL SEÑOR
PETICIONES
11. LA ENCARNACIÓN DEL HIJO DE DIOS
PRIMER MISTERIO GOZOSO:
<<Al sexto mes el Ángel Gabriel fue enviado por Dios a una
ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen
desposada con un hombre llamado José, de la estirpe de
David, el nombre de la virgen era María>> (Lc 1, 26-27)
Palabra del Señor.
Gloria ti Señor Jesús
12. PADRE NUESTRO
Padre Nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad,
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Amén.
13. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
14. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
15. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
16. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
17. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
18. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
19. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
20. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
21. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
22. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
23. Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
María, Madre de Gracia, Madre de
Misericordia, en la vida y en la muerte
ampáranos Gran Señora.
¡Oh! Jesús mío, perdona nuestros
pecados, líbranos del fuego del infierno,
lleva al cielo a todas las almas,
especialmente a las más necesitadas de
tu misericordia. Amén.
24. LA VISITACIÓN DE NUESTRA SEÑORA A SU PRIMA
ISABEL
SEGUNDO MISTERIO GOZOSO:
<<En aquellos días María se puso en camino y fue de prisa a la
región montañosa, a una ciudad de Judá; entró en casa de
Zacarías y saludó a Isabel. Y sucedió que, en cuanto Isabel oyó el
saludo de María, saltó de gozo el niño en su seno, e Isabel quedó
llena de Espíritu Santo; y exclamando a voz en grito, dijo: “Bendita
tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu seno”>> (Lc 1, 39-42)
Palabra del Señor.
Gloria ti Señor Jesús
25. PADRE NUESTRO
Padre Nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad,
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Amén.
26. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
27. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
28. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
29. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
30. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
31. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
32. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
33. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
34. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
35. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
36. Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
María, Madre de Gracia, Madre de
Misericordia, en la vida y en la muerte
ampáranos Gran Señora.
¡Oh! Jesús mío, perdona nuestros
pecados, líbranos del fuego del infierno,
lleva al cielo a todas las almas,
especialmente a las más necesitadas de
tu misericordia. Amén.
37. EL NACIMIENTO DEL HIJO DE DIOS EN EL PORTAL DE
BELÉN
TERCER MISTERIO GOZOSO:
<<Sucedió que por aquellos días salió un edicto de César Augusto
ordenando que se empadronase a todo el mundo. Este primer
empadronamiento tuvo lugar siendo Cirino gobernador de Siria. Iban todos
a empadronarse, cada uno a su ciudad. Subió también José de Galilea, de
la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén,
por ser él de la casa y familia de David, para empadronarse con María, su
esposa, que estaba encinta. Y sucedió que, mientras ellos estaban allí, se le
cumplieron los días del alumbramiento, y dio a luz a su Hijo primogénito, lo
envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no tenían sitio en el
alojamiento>> (Lc 2, 1-7)
Palabra del Señor.
Gloria ti Señor Jesús
38. PADRE NUESTRO
Padre Nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad,
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Amén.
39. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
40. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
41. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
42. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
43. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
44. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
45. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
46. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
47. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
48. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
49. Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
María, Madre de Gracia, Madre de
Misericordia, en la vida y en la muerte
ampáranos Gran Señora.
¡Oh! Jesús mío, perdona nuestros
pecados, líbranos del fuego del infierno,
lleva al cielo a todas las almas,
especialmente a las más necesitadas de
tu misericordia. Amén.
50. LA PRESENTACIÓN DE JESÚS
EN EL TEMPLO
CUARTO MISTERIO GOZOSO:
<<Cuando se cumplieron los ocho días para circuncidarlo, se le dio
el nombre de Jesús, como lo había llamado el ángel antes de ser
concebido en el vientre. Cuando se cumplieron los días de la
purificación de ellos, según la Ley de Moisés, llevaron a Jesús a
Jerusalén para presentarlo al Señor, como está escrito en la Ley
del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor y
para ofrecer en sacrificio un par de tórtolas o dos pichones,
conforme a lo que se dice en la ley del Señor>> (Lc 2, 21-24)
Palabra del Señor.
Gloria ti Señor Jesús
51. PADRE NUESTRO
Padre Nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad,
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Amén.
52. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
53. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
54. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
55. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
56. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
57. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
58. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
59. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
60. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
61. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
62. Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
María, Madre de Gracia, Madre de
Misericordia, en la vida y en la muerte
ampáranos Gran Señora.
¡Oh! Jesús mío, perdona nuestros
pecados, líbranos del fuego del infierno,
lleva al cielo a todas las almas,
especialmente a las más necesitadas de
tu misericordia. Amén.
63. EL NIÑO JESÚS PERDIDO Y HALLADO EN EL
TEMPLO
QUINTO MISTERIO GOZOSO:
<<Sus padres iban todos los años a Jerusalén a la fiesta de la Pascua.
Cuando tuvo doce años, subieron ellos como de costumbre a la fiesta
y, al volverse, pasados los días, el Niño Jesús se quedó en Jerusalén,
sin saberlo sus padres…
Y sucedió que al cabo de tres días, le encontraron en el Templo
sentado en medio de los maestros, escuchándoles y preguntándoles;
todos los que le oían, estaban estupefactos por su inteligencia y sus
respuestas>> (Lc 2, 41-47)
Palabra del Señor.
Gloria ti Señor Jesús
64. PADRE NUESTRO
Padre Nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad,
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
Amén.
65. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
66. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
67. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
68. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
69. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
70. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
71. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
72. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
73. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
74. AVE MARÍA
AVE MARÍA
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre,
Jesús.
Santa María,
Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
75. Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y
siempre, por los siglos de los siglos.
Amén.
María, Madre de Gracia, Madre de
Misericordia, en la vida y en la muerte
ampáranos Gran Señora.
¡Oh! Jesús mío, perdona nuestros
pecados, líbranos del fuego del
infierno, lleva al cielo a todas las
almas, especialmente a las más
necesitadas de tu misericordia. Amén.
76. Señor, ten piedad
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Señor, ten piedad
Cristo, óyenos
Cristo, óyenos
Cristo, escúchanos
Cristo, escúchanos
Dios, Padre celestial
ten piedad de nosotros
Dios, Hijo, Redentor del
mundo
ten piedad de nosotros
Dios, Espíritu Santo
ten piedad de nosotros
Santísima Trinidad, un solo
Dios
Ten piedad de nosotros
LETANÍAS
77. Santa María
ruega por nosotros
Santa Madre de Dios,
ruega por nosotros
Santa Virgen de las
Vírgenes
ruega por nosotros
Madre de Cristo
ruega por nosotros
Madre de la Iglesia,
ruega por nosotros
Madre de la misericordia,
ruega por nosotros
Madre de la divina gracia,
ruega por nosotros
Madre de la esperanza,
ruega por nosotros
LETANÍAS
78. Madre purísima,
ruega por nosotros
Madre castísima,
ruega por nosotros
Madre siempre virgen,
ruega por nosotros
Madre inmaculada,
ruega por nosotros
Madre amable,
ruega por nosotros
Madre admirable,
ruega por nosotros
Madre del buen consejo,
ruega por nosotros
Madre del Creador,
ruega por nosotros
LETANÍAS
79. Madre del Salvador,
ruega por nosotros
Virgen prudentísima,
ruega por nosotros
Virgen digna de veneración,
ruega por nosotros
Virgen digna de alabanza,
ruega por nosotros
Virgen poderosa,
ruega por nosotros
Virgen clemente,
ruega por nosotros
Virgen fiel,
ruega por nosotros
Espejo de justicia,
ruega por nosotros
LETANÍAS
80. Trono de la sabiduría,
ruega por nosotros
Causa de nuestra alegría,
ruega por nosotros
Vaso espiritual,
ruega por nosotros
Vaso digno de honor,
ruega por nosotros
Vaso de insigne devoción,
ruega por nosotros
Rosa mística,
ruega por nosotros
Torre de David,
ruega por nosotros
Torre de marfil,
ruega por nosotros
LETANÍAS
81. Casa de oro,
ruega por nosotros
Arca de la Alianza,
ruega por nosotros
Puerta del cielo,
ruega por nosotros
Estrella de la mañana,
ruega por nosotros
Salud de los enfermos,
ruega por nosotros
Refugio de los pecadores,
ruega por nosotros
Consuelo de los migrantes,
ruega por nosotros
Consoladora de los afligidos,
ruega por nosotros
LETANÍAS
82. Auxilio de los cristianos,
ruega por nosotros
Reina de los Ángeles,
ruega por nosotros
Reina de los Patriarcas,
ruega por nosotros
Reina de los Profetas,
ruega por nosotros
Reina de los Apóstoles,
ruega por nosotros
Reina de los Mártires,
ruega por nosotros
Reina de los Confesores,
ruega por nosotros
Reina de las Vírgenes,
ruega por nosotros
LETANÍAS
83. Reina de todos los Santos,
ruega por nosotros
Reina concebida sin pecado
original,
ruega por nosotros
Reina asunta a los Cielos,
ruega por nosotros
Reina del Santísimo
Rosario,
ruega por nosotros
Reina de la familia,
ruega por nosotros
Reina de la paz,
ruega por nosotros
LETANÍAS
84. LETANÍAS
Cordero de Dios, que quitas el
pecado del mundo,
perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el
pecado del mundo,
escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el
pecado del mundo,
ten misericordia de nosotros.
Ruega por nosotros, Santa
Madre de Dios.
Para que seamos dignos de
alcanzar las promesas y
gracias de nuestro Señor
Jesucristo.
Amén.
85. Te rogamos nos concedas,
Señor Dios nuestro,
Gozar de continua salud de alma y cuerpo,
Y por la gloriosa intercesión
De la bienaventurada siempre Virgen María,
vernos libres de las tristezas de la vida
presente
Y disfrutar de las alegrías eternas.
Por Cristo nuestro Señor.
Amén.
ORACIÓN
86. Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida,
dulzura y esperanza nuestra, Dios te salve.
A ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a ti
suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de
lágrimas.
Ea, pues, Señora abogada nuestra, vuelve a
nosotros esos tus ojos misericordiosos y, después
de este destierro, muéstranos a Jesús, fruto
bendito de tu vientre.
¡Oh clementísima! ¡Oh piadosa!
¡Oh dulce Virgen María!
Ruega por nosotros santa Madre de Dios,
Para que seamos dignos de alcanzar las
promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén.
SALVE
87. San Miguel Arcángel, defiéndenos en la
lucha.
Sé nuestro amparo contra la perversidad y
asechanzas del demonio.
Que Dios manifieste sobre él su poder,
es nuestra humilde súplica.
Y tú, oh Príncipe de la Milicia Celestial, con el
poder que Dios te ha conferido,
arroja al infierno a Satanás, y a los demás
espíritus malignos que vagan por el mundo
para la perdición de las almas. Amén.
Oración a San Miguel
Arcángel
88. Gracias por acompañarnos a
contemplar los misterios
gozosos de la vida de nuestro
Señor Jesucristo y honrar a
nuestra Madre Santísima
Notas del editor
Oremos por nuestra Iglesia: para que el Papa Francisco, los Obispos, los Sacerdotes, los Diáconos, las Hermanas Religiosas y nuestros fieles ejerzan los dones del Espíritu Santo para que el miedo s